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Salou es el municipio tarraconense donde los paradistas del mercadillo pagan más por instalar su parada. «Es un mercado de temporada pero es el más caro de todos», afirma el presidente de la Associació de Marxants de la província de Tarragona, Josep Gómez. Según explica, desde el pasado mes de junio el mercadillo de Salou, que se instala cada lunes por la mañana en el Passeig del 30 d’Octubre, ha perdido casi veinte paradas. Algunos marchantes porque no quiseron seguir. Otros, porque no pudieron hacer frente a las cuotas exigidas por el Ayuntamiento por la ocupación de la vía pública.
Una parada de doce metros paga al año 3.113,76 euros en Salou. En Tarragona ciudad pagaría 2.920,32 euros anuales mientras que en Bonavista y Torreforta 2.808 euros, en El Vendrell, 2.527,2 euros y en Reus 2.121,6 euros. En Cambrils, la diferencia es de más de 1.000 euros. Una de las mismas dimensiones debería abonar 2.028 euros anuales mientras que en L’Hospitalet de l’Infant asciende a 1.541,28 euros.
En La Pineda, que en este caso tiene mercadillo cada viernes desde Semana Santa hasta el mes de octubre, es una de las localidades donde sale más económico. Cada metro lineal de parada cuesta 2,10 euros al día. Desde la Associació de Marxants destacan que en Barcelona, Girona o Lleida los precios «son como mínimo un 30% más económicos».
En Salou «estamos pagando mucho por lo que se vende. Muchos días vienes aquí y pierdes el tiempo», lamenta Gómez. El presidente de los marchantes quiere pedir una reunión con el consistorio con el objetivo revisar a la baja las tasas anuales que pagan los paradistas. En este sentido, cree que sería bueno analizar los costes de vigilancia y limpieza que supone el mercadillo para el consistorio con tal de fijar unos precios más ajustados.
Hace años que los marchantes exigen que las administraciones les devuelvan el dinero de los días que no hayan podido montar sus paradas por cuestiones meteorológicas. En toda la provincia solo se hace en Reus. «El día que hace mal tiempo te lo abonan», explica Gómez. De modo que a final de temporada se les resta la cantidad correspondiente a los días que no han podido trabajar por motivos externos. En el caso de Reus cuando hay más del 10% de paradas instaladas, el mercadillo se da por válido. Ayer en Salou, fueron muchos los que ya no montaron su parada por el fuerte viento. «Pero tendremos que pagar lo mismo a finales de año», apuntan.
Enric Daza, presidente de la Associació de Marxants de Tarragona ciudad, también monta su parada en Salou. «Los números no salen. Haces las paces y gracias», afirma. Aunque el mercadillo es durante todo el año asegura que tan solo «trabajan» durante siete meses.
Daza considera que en temporada baja el mercadillo debería trasladarse en una zona más céntrica o comercial como por ejemplo el Passeig Jaume I. Una fórmula que también serviría para «dinamizar el comercio». «En El Vendrell han rescatado el mercadillo que estaba en las afueras de la ciudad y lo han instalado en el centro. Juntar el mercadillo con el comercio ha funcionado», apunta Daza.
Los marchantes aseguran que el mercadillo de Salou ya no funciona como antes por una suma de factores. El descenso del turismo, la competencia desleal del top manta o el comercio por internet son algunos de ellos. Daza remarca que «los tiempos han cambiado» y que ahora las administraciones deben potenciar los mercados como atractivos turísticos y asegurar que haya paradas de calidad.
Desde el Ayuntamiento dicen que hace poco tiempo que el Departament de Comerç y la Regidoria de Tributs revisaron las tasas que pagan los marchantes por instalar sus paradas y aseguran que se encuentran «dentro de los baremos de otros mercadillos».
El grupo municipal de ERC ha solicitado recientemente al equipo de gobierno la bajada de las tasas para los comerciantes del mercadillo de Salou, «para adecuarlas a la de otros municipios de la entorno». Una demanda que aseguran que el consistorio rechazó.
