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El endurecimiento de las medidas obligatorias de confinamiento para luchas contra el coronavirus que ha decretado el Gobierno Central, hizo temer un desplazamiento masivo de vecinos del área de Barcelona a las segundas residencias del Baix Penedès.
La pasada semana fueron muchos los que se desplazaron pese a la prohibición. Viviendas que durante la semana estuvieron vacías pudieron verse con luces encendidas el pasado sábado y domingo. Por eso la restricción de trabajos podía llevar a un nuevo desplazamiento masivo.
Policías locales de El Vendrell, Calafell y Cunit, conjuntamente con Mossos d'Esquadra establecieron ya en la tarde del viernes controles en las principales vías de acceso a los municipios. Sin embargo algunos vecinos denunciaron en las redes sociales que volvieron a abrirse persianas.
Sin embargo, desde las policías locales explican que son muchos menos que hace una semana. La Policía Local de Calafell obligó este sábado a dar media vuelta a personas que llegaban al municipio sin justificación de residencia. La policía puso 5 denuncias por vulnerar el confinamiento y la prohibición de acudir a segundas residencias.
Destaca una imagen comparativa de uno de los aparcamientos gratuitos de Calafell que no muestra mucha diferencia de ocupación entre la mañana y la noche del viernes.
La Policía de El Vendrell también estableció controles. Explican que ha bajado ese tránsito. Este sábado denunciaron a vecinos de la comarca que estaban paseando por la calle.
También en Cunit explican que esta semana no ha tenido comparación con la anterior. En la localidad ya hubo controles el viernes por la tarde y el sábado por la mañana.
