Mujeres que han decidido tener hijos sin pareja

Reportaje. La Asociación Socioeducativa Por Un Mundo Feliz (PUM Feliz) de Salou vuelve a arrancar motores. Hoy celebran un encuentro para hablar de familias monomarentales

18 noviembre 2018 15:34 | Actualizado a 20 noviembre 2018 10:02
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Mamás y punto. Mujeres que han decidido ser madres sin pareja. A partir de ahora, Salou contará con un espacio para tratar esta realidad, ofrecer recursos, compartir experiencias e inquietudes. 

Es uno de los proyectos de la Asociación Socioeducativa Por Un Mundo Feliz (PUM Feliz). La entidad, nacida en 2016, ha decidido arrancar de nuevo. Su impulsora, la salouense Laura García, explica que la asociación no nació con un objetivo muy concreto. «Lo que queríamos era ofrecer una herramienta para dar cabida a distintos proyectos relacionados con la mujer, la maternidad, la crianza y la educación». 

La iniciativa empezó cuando Laura fue madre por primera vez. Fue entonces cuando se le abrió «un mundo» que le entusiasma y le apasiona. Es maestra de educación infantil y al tener a su primera hija se formó también en el acompañamiento a la maternidad, es doula, y es educadora de masaje infantil y terapeuta menstrual. Junto a sus amigas y compañeras, que también habían sido madres, buscaban actividades para realizar con sus bebés hasta que dijeron: «¿Por qué no las hacemos nosotras?». 

En 2016 llevaron a cabo actividades puntuales de maternidad y crianza como talleres de musicoterapia en familia o círculos de mujeres. Pero les faltaba un espacio estable. No consiguieron que se les facilitara un espacio municipal. Se encontraban en casas particulares o en alguna ocasión les cedieron alguna aula de dos escuelas del municipio. Y la asociación dejó en standby su actividad entre el 2017 y el 2018. 

Entonces también crearon el grupo de Mamás y punto. Pero tan solo celebraron un primer encuentro. Y ahora lo han retomado con fuerza ya que el Hotel Acqua de Salou les ha cedido un espacio. Más de una veintena de mujeres del municipio y alrededores se dieron cita en el lugar para hacer una primera toma de contacto. 

En este grupo hay mujeres que se están planteando la maternidad sin pareja y quieren conocer esta opción, otras que ya están en tratamiento de reproducción asistida, las que ya están embarazadas y madres que decidieron formar una familia monomarental. 

Su intención es encontrarse cada quince días para tratar esta realidad. Los niños siempre son bienvenidos a los encuentros y disponen de un espacio de juego. Hoy, por ejemplo, debatirán sobre las etiquetas de este colectivo. A menudo se las define como «madre sola» o maternidad en «solitario». Precisamente Laura, que también decidió ser madre sin pareja, está en contra de estos conceptos. «¿Madres solas? La decisión de ser madre sin una pareja no comporta que vivas la maternidad en soledad. En mi caso, la maternidad ha estado acompañada de amigas, familiares y los abuelos, que han sido un pilar fundamental (…) No se trata de criticar el modelo tradicional. El hecho de tener mamá y papá no garantiza que en la familia reine la paz, el amor y el equilibrio. Se trata de cubrir las necesidades de nuestros hijos, independientemente de los miembros existentes en la unidad familiar», explica. 

Las etiquetas del colectivo

La etiqueta de madre soltera tampoco le convence. Según Laura, se «confunde» el estado civil con la relación de las mujeres con la maternidad. 

En este sentido también quiere dejar claro que la realidad de las mujeres que deciden ser madres sin pareja es muy distinta a la de las que se han divorciado, en los casos en los que hay un abandono o bien se quedan viudas. «No es lo mismo. Hay un padre. A nivel emocional, vivencial, económico y de estructuras, son realidades totalmente diferentes».

En los encuentros del grupo de Mamás y punto programados para diciembre se prevén tratar distintas cuestiones. Mujeres sin pareja que quieren ser madres será una de ellas. Se pondrán sobre la mesa recursos e información sobre el tema. Qué tipo de tratamientos de reproducción asistida hay, qué clínica elegir, etc. 

Informarse para ser conscientes

Laura explica que al principio surgen dilemas morales debido a los prejuicios existentes en la sociedad. ¿Estaré anteponiendo mi deseo de ser madre a las necesidades de mis hijos? ¿Es un acto egoísta? ¿Les faltará algo en un futuro?. Su deseo de ser madre primaba más por encima de todas las cosas. ¿Por qué debía esperar a tener pareja?, se preguntaba. Entonces empezó a informarse para poder tomar una decisión consciente. Y llegó a la conclusión de que «al final los niños lo que necesitan es amor. Y no importan los miembros que componen la familia». E insiste en la importancia de explicar los orígenes a sus hijos desde bebés. Con naturalidad. Las cosas por su nombre: «En nuestras familias no hay padre. Hay un donante. Y se tiene que nombrar», dice. 

Tienen previsto que en enero empiecen los proyectos de Maternidad y Crianza abiertos a familias y el Cícrulo de Mujeres. Ahora la entidad está en conversaciones con el Ayuntamiento para conseguir un espacio municipal. 

 

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