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La Audiencia de Tarragona juzgó ayer a un hombre que está acusado de presuntos abusos sexuales a dos niñas de doce años en el núcleo de Miami Platja, en Mont-roig del Camp.
Los hechos se remontan al 2015, cuando el hombre trabajaba como conserje en un polideportivo. Según la fiscalía, el procesado habría realizado tocamientos a las menores y, en el caso de una de ellas, los abusos se habrían producido hasta en tres ocasiones.
Durante la vista, el hombre se declaró inocente y negó los hechos. Por su parte, la fiscalía mantuvo la petición de seis años y medio de prisión por un presunto delito continuado de abusos sexuales y otro de abusos sexuales.
La acusación particular que representa a una de las víctimas se ha adherido a la petición del fiscal, que también prevé una prohibición de acercarse a las menores a una distancia inferior a 200 metros durante un periodo de cinco años y el pago de 2.000 euros a cada una de ellas en concepto de daños morales.
Según el abogado de la defensa, Gerard Amigó, ayer las dos menores declararon una versión «bastante distinta» de la que dieron en su día sobre los tocamientos. El abogado señaló que su cliente atribuye la acusación al hecho de que, ante los casos de incivismo registrados en el pabellón, en alguna ocasión había expulsado a varios menores del recinto.
En las conclusiones definitivas, la fiscalía y la acusación solicitaron cuatro años de prisión por el delito continuado de abusos sexuales y dos años y medio por el delito simple de abusos. Por su parte, la defensa pidió la libre absolución. Tras escuchar las declaraciones del procesado y de los testigos, el tribunal de la sección segunda de la Audiencia de Tarragona dejó el caso visto por sentencia.
