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Cada día en El Vendrell se recogen hasta 7.000 kilos de muebles y voluminosos tirados en las calles de forma incívica e irresponsable. Durante todo el año este fenómeno ya es un problema. Pero en verano aumenta sin que se le haya sabido poner freno hasta el momento. A pesar del servicio de recogida a domicilio gratuito para los voluminosos que los vecinos pueden solicitar por teléfono, son todavía muchos los vecinos que optan por tirar sus residuos a la calle.
El concejal del área en el Ayuntamiento de El Vendrell, Ferran Trillas, explica que cuando se observan muebles tirados en la calle se intentan recoger de manera rápida en un plazo de dos días, pero el problema es que al día siguiente hay más.
Además de muebles, otro de los problemas son los vertidos de restos de poda de manera descontrolada. El Ayuntamiento ha iniciado una campaña para intentar convencer a los vecinos de un comportamiento cívico, pero hasta ahora esas iniciativas se han mostrado ineficaces. Así, lo que deber ser más efectivo son las sanciones.
El concejal explica que este año ya se han puesto 15 multas. Una de las opciones que plantea el consistorio es la de crear una brigada de policía administrativa que esté dedicada exclusivamente al control de los residuos.
El objetivo sería cazar a los incívicos y poder sancionarlos. De lo contrario la acumulación de basuras en la vía pública, además de la mala imagen de suciedad y problemas de salubridad, también supone un riesgo de incendios y daños a propiedades privadas.
