Preocupación en Vila-seca por los vuelos de aviones en prácticas

Los vuelos de aviones en prácticas sobre el núcleo urbano genera quejas e inquietud en Vila-seca. El alcalde, Josep Poblet (CiU), ha enviado una carta a Vicenç Pallarès, director del aeropuerto de Reus –de donde proceden estas aeronaves–, para trasladarle «la preocupación de los vecinos» por estas pruebas. El malestar de los vilasecanos , y de otras localidades de alrededor, no es nuevo. Hace años que varias compañías comerciales, como Vueling o Lufthansa, realizan maniobras de entrenamiento en el cielo tarraconense, sobre todo en invierno y los fines de semana. También los alumnos del Centro de Estudios Superiores de la Aviación (Cesda).

En su misiva, Poblet señala que «somos conscientes de la legalidad y la seguridad de esta actividad formativa profesional y valoramos positivamente lo que representa para la sostenibilidad económica de nuestro aeropuerto», pero advierte de que «dadas las características técnicas y morfológicas de las actividades económicas e industriales de nuestro territorio, a veces se producen episodios de alarma social entre los colectivos y entidades afectadas por estas prácticas y por parte de los residentes de los municipios cercanos al aeropuerto».

En el caso concreto de Vila-seca, asegura que el consistorio ha recibido quejas de vecinos «por las posibles molestias acústicas y ambientales». Y reclama a Pallarès que las compañías aéreas «velen escrupulosamente por el cumplimiento estricto de los planes de estos vuelos y sus pilotos en prácticas, sobre todo en lo que respecta a las altimetrías e itinerarios sobre poblaciones e instalaciones empresariales».

Mediante una instancia presentada la semana pasada en el Ayuntamiento, un vecino reclama medidas para acabar con estas prácticas antes de que se tenga que lamentar un accidente, y pide el apoyo de otros municipios afectados y de las industrias petroqúimicas. Considera cuestionable que «los intereses de unos pocos pasen por delante de la seguridad y derechos de la mayoría de ciudadanos».

«Es un riesgo añadido para el entorno. Estas prácticas se deberían hacer en los aeropuertos libres de tráfico, que haberlos hay y en cantidades excesivas en este país, sin afectar áreas urbanas. Ojalá no tengamos que lamentar nunca un accidente o incidente», apunta otro vecino.

Esta opinión es compartida en la calle. «No tengo nada en contra de estas prácticas, pero no deberían hacerse sobre el núcleo urbano y la zona de las petroquímicas», indica un vilasecano. «¿Quién o quiénes son los responsables de autorizar estos vuelos tan irresponsables sobre PortAventura, las playas de Cambrils, La Pineda, Salou y Tarragona?», se pregunta otro.

«Creo que tienen suficiente sitio en el aire como para practicar con nosotros debajo. Si te pones en lo peor, puedes pensar que tenga un fallo y caiga en el pueblo», manfiesta un joven. «He visto pasar aviones en prácticas por encima del castillo», añade.

‘Cumplen los requisitos’

Aena siempre ha sostenido que estos vuelos desde el aeropuerto de Reus cumplen con la normativa vigente. Y que, mayoritariamente, los realizan profesionales que tienen que acumular horas en el aire o mantener sus licencias y superar las pruebas periódicas para demostrar sus aptitudes. Suelen hacerse en grupos de ocho pilotos y están supervisadas por un instructor.

En un escrito remitido al Diari en mayo, el director del aeropuerto incide en que «estos ejercicios, autorizados, seguros y reglamentados, cumplen con todos los requerimientos establecidos por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).