Renovarse o morir: el frágil momento de las tiendas de souvenirs

Los locales incorporan nuevos productos para atraer la atención de un cliente que cada vez compra menos

28 julio 2018 17:27 | Actualizado a 28 julio 2018 18:19
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Comprar regalos para la familia y amigos en una tienda de souvenirs de la ciudad donde se veraneaba era casi una cita obligada hace unos años. En este establecimiento se podían encontrar todo tipo de objetos promocionales con el nombre de la localidad y por qué no decirlo, «salvaba» a más de uno que durante las vacaciones no había pensando en los regalos y que los iba a comprar en el último momento.

Sin embargo, actualmente estas tiendas ya no son lo que eran. No solo por la competencia que ha surgido con la apertura de nuevos locales en calles donde ya existían comercios tradicionales, también por el poco interés de los turistas, que quieren productos originales y novedosos. 

Con la premisa de «renovarse o morir», los establecimientos de la Costa Daurada han evolucionado en una especie de supermercado, donde ya no solo venden los clásicos llaveros, imanes o postales, sino que desde hace tiempo han ampliado su oferta con toallas, juguetes infantiles e incluso ropa para diferenciarse de la competencia. 

Emojis por flamencas
Uno de los objetos ‘typical spanish’ más tradicionales de las tiendas de souvenirs es la muñeca vestida de flamenca, un producto que ya no se vende como antes.  El problema que tienen algunos vendedores es el de quitarse de encima el stock que tienen desde hace tiempo y que no consiguen vender ni a un precio muy económico. «Hace un par de años que ya no compro este tipo de objetos porque no interesan. También ocurre con los platos de decoración y los toros», explica Laxmi Narayan, de Tandem Fashion, una tienda ubicada en la calle Josep Carner de Salou. Según señala, ahora la gente opta más por la ropa -continúa el ‘boom’ de los trajes infantiles de flamenca- y flotadores, el elemento estrella desde hace un par de veranos.  

Entre esta selección de productos españoles también hay sitio para las panderetas y las botellas de sangría, pero captan la atención de muy pocos. «Todo esto ya no se venden, la gente quiere otra cosa», explica Sandra de Carricondo, un local de la avenida Andorra donde se puede comprobar que los reyes de los souvenirs son los emojis, sobre todo las tazas y los llaveros. 

En la línea de buscar cómo diferenciarse de la competencia, la tienda Terra Cuita, ubicada en la misma zona, vende figuras de cerámica de toros y flamencas que consiguen ofrecer un producto diferente y pensado para aquellas personas que les gusta coleccionar estos objetos más exclusivos. «Vendemos piezas artesanas, también figuras de Lorenzo Quinn, tenemos que innovar para vender», apunta Jordi Masgoret. 

Imanes y llaveros
Desde los diferentes locales de Salou y Cambrils aseguran que los artículos que más se venden son los imanes y los llaveros con los nombres de las poblaciones. Destacan los imanes que incluyen un tarro con arena de la playa de las dos localidades, así como los que están inspirados en las obras de Gaudí. También Barcelona y todo lo relacionado con el Barça tienen mucho éxito entre los turistas. 

Por el contrario, la venta de la postal ha bajado bastante y prácticamente todos los visitantes capturan con sus ‘smartphone’ las mejores vistas de la costa. «Hace 20 años teníamos entre 3 y 4 rollos de postales pero ahora solo compran los belgas y los franceses», señala Masgoret.

Desde Carricondo aseguran que los artículos relacionados con el independentismo catalán causan sensación entre rusos y ecoceses. ¿Los más vendidos? Las pulseras y las banderas esteladas. 

Temporada floja
Aunque venden objetos diferentes y reistran más o menos ventas, todos los establecimientos coinciden en que esta temporada está siendo floja. «La gente solo gasta para comer, apenas vendemos souvenirs. Solo toallas, imanes y alguna taza», explican desde Tanoli, en Cambrils, mientras que desde Internet Center apuntan: «este año estamos vendiendo un 30% menos, se está notando mucho». 

Productos originales. 

Muchas tiendas ofrecen artículos como tazas y bolis con diferentes estampados tropicales para diferenciarse de la competencia.

El presidente de la Federació Empresarial d’Hostelería i Turisme de la provincia de Tarragona (FEHT), Eduard Farriol, afirma al Diari: «desde principios de 2018 dijimos que este no sería un año récord. Han vuelto los mercados competitivos de Turquía, Egipto y Túnez (...) No estamos calificando la temporada de desastre, creo que estamos a niveles de 2016».

Farriol también asegura que el comercio se debe modernizar para atraer a la gente. «Las tendencias cambian y el comercio se debe actualizar como hacen los hoteles y restaurantes», dice. 

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