Un cambio de contrato del Ayuntamiento de Salou deja sin empleo a seis personas

Seis personas denuncian haberse quedado sin trabajo por «una mala gestión del Ayuntamiento de Salou». El consistorio dividió en dos lotes el contrato por el mantenimiento del alumbrado público y el mantenimiento de edificios municipales. Y como consecuencia, ahora seis operarios han perdido su trabajo porque una de las nuevas empresas no ha querido subrogarles alegando que no estarían obligados a hacerlo según el convenio colectivo. 

Ayer los afectados manifestaron su malestar en el pleno municipal con una pancarta en la que acusaban al Ayuntamiento de encontrarse en esta situación por su «mala gestión» y por haber dividido este contrato. Desde el pasado 1 de febrero están sin trabajo y algunos de ellos ni tan solo cobran el paro. 

«Se les ofreció un trabajo precario, sin respetar la antigüedad  (... ) todos debemos tener las mismas subrogaciones», Ramon Del Amo, representante de CCOO

Se trata de los trabajadores que hasta ahora realizaban tareas de mantenimiento en la ciudad a través de la empresa Rubatec. El contrato de la compañía venció en 2017 y ahora recientemente el consistorio sacó a licitación los servicios que realizaba pero esta vez en dos paquetes. El mantenimiento del alumbrado público, de los semáforos y fuentes ha sido adjudicado a la UTE Citelum-Comsa, SA. Por otra parte, el mantenimiento de edificios y dependencias municipales ha sido concedido a la empresa Mancobra, SA. 

El representante de CCOO de los trabajadores, Ramon Del Amo, explicó que tan solo han sido subrogados los operarios que trabajarán en el mantenimiento del alumbrado tal y como marca el convenio del sector metalúrgico de Tarragona. Pero en cambio, la empresa Mancobra considera que no está obligada a subrogar el personal pero sí que les ofreció un «trabajo precario, con un sueldo base sin respetar ninguna antigüedad cuando algunos de ellos  tienen 17 o 35 años de antigüedad (…) todos tenemos que tener las mismas subrogaciones», apunta Del Almo. 

«El Ayuntamiento ya ha medidado y se ha hecho lo que legalemente podíamos hacer», Jesús Barragán, concejal de Concessions

De los seis trabajadores afectados tan solo tres han podido cobrar el paro. Y los otros tres no han conseguido cobrarlo por estar sujetos a esta cláusula subrogación que contempla que trabajen para otra empresa. «Están en un limbo sin trabajar y sin cobrar», dice del Almo.

Durante el mes de enero los trabajadores mantuvieron distintas reuniones con el Ayuntamiento y las empresas implicadas. E incluso se llevaron a cabo tres actos de conciliación con el Tribunal Laboral Català. Desde CCOO propusieron repartir los trabajadores entre las tres empresas pero no consiguieron llegar a un acuerdo. Probablemente la situación terminará en los tribunales. 

Los trabajadores lamentan también que en el pliegue de condiciones del contrato de mantenimiento de las dependencias municipales, el Ayuntamiento no establezca una clara subrogación de personal. El documento indica que la cuestión dependerá de lo que marque el convenio del metal  y el estatuto de trabajadores. 

«Trabajaremos para solucionarlo a pesar de que no son trabajadores del Ayuntamiento», Pere Granados, alcalde de Salou 

Fuentes de Rubatec explican que los convenios colectivos de las empresas de servicios públicos sí que contemplan la subrogación de personal. Creen que los trabajadores se deberán redistribuir entre las nuevas empresas y consideran que «el Ayuntamiento no puede lavarse las manos». 

Por su parte, el concejal de Concessions, Jesús Barragán, aclaró que desde el Ayuntamiento han mediado y han hecho lo que legalmente pueden hacer. «La situación de estos trabajadores es consecuencia de los convenios colectivos que no prevén la subrogación de trabajadores de las nuevas empresas. Pero nos hemos de regir por las normas que tenemos. No puedo decir nada más que lo sentimos y solidarizarme con ellos (…) espero que se pueda solucionar pero desafortunadamente no está en nuestras manos», explicó Barragán. 

El alcalde Pere Granados indicó que seguirían trabajando para solucionarlo a pesar de que «no son trabajadores del Ayuntamiento de Salou sino que son personas que pertenecen a la plantilla de empresas privadas».