Agentes de la Policía de la Generalitat - Mossos d'Esquadra del Área Regional de Tráfico de la Región Policial Camp de Tarragona detuvieron ayer lunes, un hombre de 61 años, de nacionalidad española y vecino de Vila-seca, como presunto autor de un delito contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol, negarse a realizar las pruebas de alcoholemia y por atentado a los agentes de la autoridad.
A las 16.05 horas de ayer, agentes de tránsito se encontraban realizando un control en la N-340 en el municipio de Mont-roig del Camp. De repente, vieron como un vehículo que se encontraba a unos 50 metros del control hacía un giro repentino a la derecha y entraba en un camino sin asfaltar.
Un vehículo policial salió del control con el fin de investigar el posible vehículo fugitivo, y lo localizó en la rotonda que enlaza la T-323 con la autovía A-7. Al detenerlo, los agentes lo identificaron e hicieron la prueba de alcoholemia al conductor.
Al informarle de que había dado positivo y que había que repetir de nuevo la prueba con el etilómetro evidencial, el hombre cambió su actitud hacia los agentes y se puso agresivoEl resultado de la prueba con el etilómetro fue de 0,94 ml/l. Al informarle de que había dado positivo y que había que repetir de nuevo la prueba con el etilómetro evidencial, el hombre cambió su actitud hacia los agentes y se puso agresivo.
Después de varias negativas a la prueba de detección con el etilómetro evidencial, los agentes le informaron que quedaría denunciando penalmente por negativa a someterse a las pruebas de alcoholemia. En este momento, el hombre golpeó por la espalda a uno de los agentes y en el pecho a otro y finalmente quedó detenido.
El detenido ha pasado hoy a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Reus, que ha decretado su libertad con cargos.