Un mosso y su hermano salvan a cinco niños y un hombre de morir ahogados

Iván y Cristian rescataron a los ocupantes de un vehículo, cuando la riera de Cunit lo había arrastrado hacia el mar durante la fuerte tormenta del día 15 de agosto

19 mayo 2017 22:01 | Actualizado a 22 mayo 2017 14:28
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Un agente de los Mossos d’Esquadra que estaba fuera de servicio y su hermano -que trabaja en el Sistema d’Emergències Mèdiques, i también estaba fuera de servicio- salvaron a cinco niños y un hombre cuando una tormenta arrastró por la riera de Cunit el vehículo en el que viajaban. Los hechos ocurrieron el día 15 de agosto, cuando sobre las 21 horas empezó una tormenta muy intensa, llenando la riera que separa Cunit y Cubelles. Minutos después, el vehículo trató de cruzarla, pero el agua lo cubrió por completo y lo arrastró hacia el mar. Iván (el agente) y su hermano Cristian estaban en el balcón de su apartamento, y cuando vieron la escena, bajaron corriendo para tratar de ayudarles.

El coche se quedó parado unos metros antes del lugar donde desemboca la riera, y el mosso y su familiar aprovecharon para acercarse y tratar de tranquilizar a los ocupantes -cinco niños de entre dos y diez años y un hombre - que, según cuenta el propio Iván, estaban muy alterados. Iván explicaba ayer a los medios que todas las puertas del automóvil estaban bloqueadas. «Por ello decidimos sacar a los niños por una ventana que estaba abierta», apuntó. Fue entonces cuando bajaron a la riera, se sujetaron a una acera con una mano y con la otra lograron liberar dos de los cuatro pequeños.

Pero se encontraron con un contratiempo que les puso las cosas más difíciles. «Cuando intentamos sacar del coche al tercer niño, él mismo salió por la ventan, pero no pudo llegar a nosotros y quedó bajo el agua, justo debajo del coche. Suerte que conseguimos localizarle y arrastrarle hacia fuera», apuntaba ayer Iván, quien confesó que fue una experiencia «muy dura». Pero todavía faltaba una niña, que sujetaba a un pequeño de dos años. Iván y su hermano no podían alcanzarles, pero Cristian subió sobre el coche, consiguió sacarlos y entregarlos al agente que esperaba en la acera.

Cuando todos los niños estaban a salvo, el agente dijo al conductor que saliera del vehículo por la puerta delantera, que quedaba opuesta a la corriente del agua. Consiguió acceder a la puerta, y luego cogió de la mano a los agentes y le ayudaron a sa

lir de la riera. «Todo ocurrió muy rápido, fueron apenas unos diez minutos. Pero para nosotros fue una eternidad. En aquel momento no piensas en lo que puede pasar pero fue realmente duro», confesaba Iván. Cuando llegó la patrulla policial, sobre las 21.30 horas, ya habían logrado rescatarles. «Mi novia se había quedado llamando, y cuando bajó acabábamos de rescatar al conductor. Fue todo muy deprisa pero a nosotros se nos hizo eterno», señaló.

Comentarios
Multimedia Diari