Un respiro para Carolina

Carolina temía que llegase este jueves. Estaba previsto el desahucio de la casa que ocupó en el Priorat de Banyeres y ya avisó que no tenía a dónde ir con su marido y sus tres hijos menores. Desde primera hora de la mañana esperaba acompañada de miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) del Baix Penedès.

La situación de la familia ha mejorado, pero debía seguir en la casa que ocupó en Banyeres y que pertenece a una entidad bancaria. El marido ha encontrado trabajo y están buscando una vivienda de alquiler, pero nadie les alquila. La familia ya perdió una primera vivienda en Llorenç del Penedès. Entregaron esa casa en dación de pago, pero quedó una deuda de 25.000 euros que fueron devolviendo a razón de 110 euros al mes.

La lista

Sin embargo desde hace meses que la nueva propiedad de la vivienda les exige pagar la deuda de una vez. Quedan por abonar 23.000 euros. "Nos dejaron de pasar las cuotas", explica Carolina. Así que la familia entró a la lista de la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito (Asnef) que señala a deudores.

"Podemos pagar un alquiler, pero al estar en esa lista nadie nos alquila", explicaba al Diari hace unos días. Así que debía seguir en la vivienda que ocuparon.Al menos hasta este jueves, cuando estaba previsto el desahucio. El pasado junio ya lo esquivó y ahora temía que se cumpliese.

Puede seguir

Pero cuando llegó la comitiva judicial informó a la familia que no les iban a echar de casa. Hasta nuevo aviso del juzgado que no se sabe cuándo será. "Pero ya es un respiro", explica Carolina., que ya pidió tiempo a la entidad bancaria para encontrar algo de alquiler. "Poder seguir en la casa es una alegría". 

Queda lo más difícil. Salir de una lista que condena a muchos a no poder encontrar un alquiler pese a que su situación haya mejorado.