Una familia de Cambrils busca un donante de médula para su hijo de cinco años

Adrián Valadés cumplirá 6 años el día 30. Sólo quiere y desea un regalo para su fiesta de cumpleaños: un donante de médula que sea compatible con la suya y pueda olvidarse de una leucemia que no le deja en paz desde que se le detectó en sus primeros años de vida.

Al pequeño cambrilense, con raíces en el barrio de La Plana de Vila-seca, se le diagnosticó esta enfermedad antes de los dos años. Es una tipología de cáncer que con quimioterapia puede neutralizarse y eliminarse para siempre del cuerpo. El pequeño se desplazó al hospital de la Vall d’Hebron y durante un tiempo creció luchando como un jabato contra la enfermedad. Los viajes a Barcelona cada vez se hicieron más cortos al saber que había esperanza después del sacrificio.

Revisiones

«Tras finalizar el tratamiento, todo salió bien. No había rastro de la enfermedad y los controles iban en este sentido», explica Lluís Valadés, su padre. Las revisiones pasaron de ser de semana en semana a los tres meses de forma gradual, demostrando que cada analítica a la que se sometía el pequeño cambrilense reforzaba la anterior: Adrián estaba curado de la leucemia. «Volvimos a hacer vida normal y el peque volvió a la escuela con sus amigos», explica el padre.

Hace un mes largo, a finales de febrero, Adrián se sentía cansado, bajo de ánimos. Los padres lo llevaron al pediatra de cabecera ante los síntomas que tenía. Su palidez de cara les recomendó pedir hora de nuevo en la Vall d’Hebron. Adrián tenía cita unos días más tarde, dentro de los protocolos de seguimiento que todavía acudía cada tres meses, pero avanzaron la visita una semana para realizar un nuevo examen médico al pequeño.

La muestra que le sacaron señalaba que había un repunte de la leucemia. «Dentro de los casos como el de Adrián es posible una recaída tardía que se trata igual que la anterior, con quimioterapia», explica Lluís Valadés.

Los médicos de la Vall d’Hebron reactivaron el tratamiento confiados en poder neutralizar de nuevo la enfermedad. Sin embargo, la quimioterapia es agresiva y el tratamiento afectaba al hígado y al páncreas. «Quedan muchas sesiones y hay riesgo de dañar a los otros órganos», admite el padre.

Ante el riesgo de que el tratamiento podría ser contraproducente, se optó por el trasplante de médula, una solución eficaz siempre y cuando se encuentre a un donante compatible.

Y por ello estos días, Adrián explica su caso por las redes sociales con sus propias palabras en un vídeo emotivo, que se ha compartido haciéndose viral. El pequeño necesita un donante y pide que la gente pueda ir a dar sangre y registrarse en la base de donantes de médula por si alguna es compatible. Pero hay un problema llamado Covid-19.

Coronavirus

En una situación anterior al 15 de marzo, la gente podría acudir al hospital Joan XXIII de Tarragona o al Sant Joan de Reus y donar sangre y pedir que se incluyera en la base de datos por si alguien a nivel mundial requiriera sus células para curar de leucemia a algún paciente que fuera compatible al 100%.

Pero en estas fechas tan complicadas por la expansión de la pandemia, los centros hospitalarios han reestructurado sus servicios para afrontar con las máximas garantías profesionales a los enfermos de Covid-19, dejando en un segundo plano otras funciones no tan prioritarias.

Por esta razón la petición de Adrián en las redes queda bloqueada ante las dificultades de poder acudir a los centros médicos para ofrecerse como donante de médula y esperar que la analítica confirme si hay compatibilidad con el pequeño Adrián.

La Fundació Josep Carreras sigue a pleno rendimiento

Los padres de Adrián Valadés se han puesto esta semana en contacto con la Fundació Josep Carreras contra la Leucèmia para conocer de primera mano si hay alguna alternativa para incrementar el número de donaciones en estos tiempos de confinamiento.

Fuentes de la Fundació han explicado al Diari que «estos son momentos complicados y la recomendación es de quedarse en casa». Las mismas fuentes señalan que «para registrse como donantes se debe ir a centros hospitalarios, que ahora es mejor evitarlos si es posible».

Juliana Villa, directora adjunta del Registro de Donantes de Médula Ósea (REDMO) gestionada por la Fundació Josep Carreras, explica que «a pesar de la situación excepcional, el equipo ha seguido trabajando y coordinando 19 colectas estas dos últimas semanas, 16 para pacientes españoles que estaban pendientes de un transplante y 3 colectas de donantes españoles para pacientes extranjeros».

Villa aprovecha para recordar a los pacientes que siguen trabajando al máximo para poder conseguir un donante compatible y poder llevar a cabo el transplante pendiente. 

Por su parte Enric Carreras (director del Registro de Donantes de Médula de la Fundació) explica que todo el personal de REDMO trabaja desde sus domicilios para cumplir con el confinamiento obligatorio. «Pero queremos decir a los pacientes y a sus familias que todo el proceso funciona igual y la actividad se sigue llevando a cabo con plenas garantías».

Trexi manda un abrazo a Adrián

El dinosaurio más conocido de Cambrils en estos días de confinamiento se llama Trexi y es un vecino que usa un disfraz para pasear a sus mascotas.

Entre los más pequeños, el vídeo de Trexi se ha hecho viral. Estos días, Trexi no ha perdido la oportunidad de enviarle un vídeo a Adrián y arrancarle una sonrisa.

Además de Trexi, Mossos d'Esquadra se acercaron este fin de semana para aplaudir en la ventana del pequeño Adrián y estos días en redes sociales el jugador del Barça Ansu Fati o el expresidente Sandro Rossell, entre otros, quisieron mostrar su afecto y su apoyo al pequeño cambrilense.