Unos 200 afectados de la Cooperativa muestran su indignación en el pleno

El Ayuntamiento de Cambrils vivió ayer una sesión plenaria cargada de tensión. Cerca de 200 personas afectadas por el cierre de la Caixa Agrària de la Cooperativa Agrícola llenaron la sala para mostrar su crispación e indignación, reclamando a la clase política que se implique para tratar de solucionar el conflicto y poder recuperar el dinero que tienen bloqueado desde el 22 de diciembre. Asistieron como medida de presión, para pedir que los concejales hagan de puente hacia la Diputació de Tarragona y la Generalitat, quienes consideran que tienen más herramientas para mediar en esta crisis, según explicó el presidente de la Plataforma d’Afectats, Dani Pallejà. Justo antes de que empezar la sesión plenaria, Pallejà pidió «voluntad política para intervenir en esta cuestión, actuando como intermediarios o con recursos». E insistió en la importancia no sólo de conseguir recuperar el dinero, sino de garantizar la viabilidad de la Cooperativa como empresa agroalimentaria.

El pleno no preveía tratar el tema de la Cooperativa. Se añadió el punto a la orden del día en el último momento. Se trató casi al final de la sesión, y la indignación fue aumentando por momentos, a medida que iban transcurriendo los puntos a debatir. Los asistentes mostraron su disconformidad con el papel que juegan las administraciones en las negociaciones, mediante silbidos, gritos y pancartas de protesta. Vergüenza o engaño fueron algunas de las palabras que más se escucharon. «Nosotros no pedimos responsabilidades, sólo pedimos ayuda», lamentaba una mujer entre el público. Otra recordaba el tiempo que llevan aguantando: «Han pasado dos meses y seguimos igual. ¿Qué han hecho?».

Los grupos políticos aprobaron por unanimidad un manifiesto de apoyo a los afectados, «poniéndonos a su disposición para ayudar en lo que sea posible», apuntó la alcaldesa, Camí Mendoza. Pese a ir todos a una, la oposición reprochó al equipo de gobierno que el tema se abordara de forma improvisada. También se plantearon distintas propuestas, como la opción de que el Ayuntamiento se plantee personarse como acusación particular, o sumarse a las acciones que promuevan los afectados, además de proponer nuevas. Las puso sobre la mesa el portavoz de la Assemblea de Cambrils, Iván Sanz.

Mendoza subrayó que impulsan todas la s medidas que tienen a su alcance para ayudar a los clientes de la sección de crédito. Ante las quejas y los gritos de los manifestantes, subrayó que «hacemos lo que podemos », señalando que «no tenemos una varita mágica para devolverles el dinero».

‘Eran los ahorros de mi vida’

Precisamente a esta expresión se refirió poco después uno de los manifestantes, José García. Aseguró que «una varita mágica es lo que han tenido en la Cooperativa, porque ha desaparecido el dinero, los ahorros de mi vida». García también se mostraba visiblemente enfadado porque «no es justo cómo se están moviendo. Me da la impresión de que no hacen todo lo que pueden y no nos dan soluciones». Y es que la desesperación es un sentimiento que comparten la mayoría de los impositores afectados.

Justo después de tratar el punto referente a la Cooperativa, los manifestantes abandonaron el salón indignados, con gritos, lamentos y silbidos. La sesión plenaria, todavía cargada de tensión, prosiguió a abordar los últimos puntos.

Mientras, los afectados siguen dispuestos a echarse a la calle y avanzan con los preparativos para manifestarse los día 6 y 13 de marzo.