Vila-seca diseña su modelo turístico pensando en cruceros, casinos y lujo

Dentro de unos años La Pineda tendrá nuevos atractivos que condicionarán el modelo turístico que ha desarrollado en las últimas tres décadas, empezando por el primer parque acuático de la Costa Daurada, continuando por una infraestructura hotelera de calidad y terminando con PortAventura y otras ofertas específicas del sector, como el wellness y los spas.

Estos nuevos elementos que entran en juego se basan en una terminal consolidada de cruceristas en la esquina norte de la playa de La Pineda o el desarrollo de resorts y casinos en el Centre Recreatiu i Turístic (CRT), antiguamente denominado BCN World.

Por todo ello, y desde hace meses, el Patronat de Turisme y los agentes que giran en torno a este motor económico de la ciudad trabajaban en una estrategia que permita a La Pineda, y por extensión al resto de la ciudad, no quedarse atrás y destacar dentro de la marca turística. Como definía ayer el alcalde Josep Poblet: «Poner el acento».

Precisamente, esta estrategia de futuro necesitaba la ayuda inestimable de la Universitat Rovira i Virgili y de los científicos del Parc Científici i Tecnològic de Turisme i Oci, con sede en la misma ciudad. Todo junto permitió ayer al mediodía presentar el plan estratégico de la actividad turística en el municipio de Vila-seca. Se trata de una hoja de ruta a corto plazo –cuatro años– que debe moldear su forma de trabajo para adecuarse a los cambios venideros y destacar como destino de calidad dentro de la propia Costa Daurada.


56 acciones y cuatro pilares
El estudio «parte de un análisis de la realidad de la oferta actual existente, la tipología de visitante que viene y de la imagen turística que proyecta», explicó Jordi Calabuig, responsable del estudio elaborado en el PCT. Es la primera capa del diagnóstico de este plan y que permite afrontar los retos concienzudamente.

Con el análisis de la realidad y las propuestas del sector privado que opera en Vila-seca se han ideado 56 acciones repartidas en cuatro pilares: orientación al rendimiento y no al volumen de visitantes; a la calidad de la oferta; a la captura de segmentos específicos y diferenciados: turista de golf, de salud, de lujo, de juego, familiar... Y finalmente un enfoque hacia un modelo competitivo de largo recorrido.

Estos cuatro pilares tienen en cuenta la metamorfosis urbanística que sufrirá Vila-seca y su entorno en los próximos años, cuando la terminal de cruceros del Port de Tarragona opere desde el dique de Els Prats y los hoteles y casinos que están previstos en el Centre Recreatiu i Turístic (CRT), antiguo BCN World, se pongan en marcha ampliando la oferta de resort.

El presidente del Patronat de Turisme, Pere Segura, expuso que «el plan estratégico es una apuesta firme para potenciar el destino e impulsar nuevas vías para conseguir un turismo de alta calidad dentro de un destino de prestigio. Ahora ya lo somos, pero queremos ser todavía más». Por su parte, el alcalde, Josep Poblet, recordó que la planificación del turismo en La Pineda empezó en la década de los años 80 del siglo pasado y la apuesta y acierto de levantar un parque acuático (1987) en el centro de este núcleo turístico. Tras ello llegó el primer complejo de cuatro estrellas –Estival Park Salou– y otros proyectos que transformaron el turismo de los años 60, 70 y 80 hacia un modelo nuevo que venía de la mano de PortAventura World.

«Ahora es momento de un nuevo cambio de estrategia y de plantear retos de futuro que vienen motivados por un nuevo modelo turístico que cambia» con la consolidación de PortAventura, la presencia de Ferrari Land, el desarrollo del CRT y la consolidación de los cruceros.

El director general de Turisme de la Generalitat, Octavi Bono, también estuvo presente ayer en la presentación oficial del evento y recordó que «con la planificación sin visión de futuro es difícil conseguir los objetivos marcados. Y si hay un lugar en la Costa Daurada donde estos dos factores siempre van de la mano, éste es Vila-seca», concluyó.