Sonrisas, lágrimas y finalmente alivio en la noche de las semifinales de Got Talent. El Vendrell ha logrado tener representación por partida doble en la final del programa de Tele 5. Y en los dos casos por votación popular.
Pero la forma de llegar a la final del programa que busca talentos ha sido de manera muy diferente. Desde los convencidos de que tenían un acceso directo, como el grupo Progenyx, al mentalista Acheron Delacroix, cuya continuidad en el programa quedó en manos de la audiencia que creía en sus posibilidades.
Alucinar
Delacroix hizo alucinar al jurado y al público con su actuación en la segunda semifinal. Y pretendía dar un paso más en su actuación de la noche del martes, pero un fallo en uno de los elementos de su número le impidió acabar.
Siendo candados comprados en los chinos todo el mundo podía visualizar que fallarían. Menos Acheron Delacroix, aun siendo mentalista. «Porque ya los había usado antes también de los chinos y habían funcionado».
Pero los candados fallaron en el peor momento posible. En plena actuación de la semifinal de Got Talent. «Me quedé paralizado cuando ví que no funcionaban. Quería que la tierra se me tragase. Intenté improvisar algo, pero fue imposible», explica Acheron al Diari. No había nada que hacer, así que no pudo acabar su número.
Esos candados debían poder haberse abierto con las cifras del año que los miembros del jurado habían escrito minutos antes en una hoja de papel.
Acheron se veía fuera de la final, pero el jurado recordó las anteriores intervenciones del mentalista y la audiencia lo metió en la final.