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El saltador ingles George Herny King-Thomson, de 22 años y otra persona de 18 fueron detenidos el lunes al alba por colarse en PortAventura. De hecho, por colarse en el parque temático de Ferrari Land. Los guardias de seguridad apresaron a los dos jóvenes y los retuvieron mientras pedían a Mossos su presencia para entregarlos. Esta es la versión que se dio el domingo y que recoge el escrito del Juzgado de Instrucción número 4 de Tarragona, donde la magistrada Sara Leo fue la encargada de dictar sentencia
A los dos jóvenes se les acusó a los dos de violación de domicilio jurídico, pasaron unas horas en los calabozos y quedaron puestos en libertad tras pasar a juicio rápido. La sentencia se les condena por allanamiento en establecimiento abierto al público fuera de las horas permitidas.
La información del lunes cuando el portal digital elcaso dio la primicia es que los dos jóvenes habían saltado el recinto perimetral del parque y se habían colado con intención de escalar y saltar (George King) y el otro grabar desde el suelo.
La sentencia de la jueza Sara Leo también recoge en los hechos probados que «mientras el acusado (George King) provisto de un paracaídas procedía a escalar la atracción Red Force el otro acusado grababa las imágenes con el material que tenía en su poder».
La explicación en la sentencia no deja claro si los dos intrépidos lograron su hazaña (ilegal) o bien fueron interceptados antes de que pudieran subir la estructura metálica de 120 metros que marca el skyline del parque. Esta fue la versión que se publicó el lunes una vez se conoció la detención de los dos.
Sin embargo, las imágenes difundidas en las últimas horas corregirían la versión del lunes, ya que el saltador británico sí habría logrado su objetivo de tirarse desde la atracción más alta de PortAventura y Ferrari Land. De hecho, la sentencia no entra a valorar ni ha condenar el salto, solo le impone los 4 meses de cárcel y una multa de 4 euros diarios durante el mismo periodo por allanamiento de morada.
Entre la cámara ubicada en el saltador (posiblemente en una de las manos que cogen las correas del paracaídas, y la del suelo habría planos suficientes para el montaje definitivo y publicarlo en redes.
La versión oficial del lunes (el parque temático ha declinado dar su opinión de estos hechos hoy y el pasado día 4) es que los planes quedaron neutralizados antes de llegar a la atracción. La información del lunes fue que no llegaron a subir a ninguna atracción (lo que contrasta con el vídeo difundido en redes). La vigilancia los localizó e interceptó antes de hacerlo.
Sin embargo, el saltador británico ha publicado (una vez recibida la sentencia condenatoria) un vídeo en las últimas horas que o bien desmiente la versión oficial de que no llegaron a subir a intentaron dos atracciones el mismo día, una segunda opción inverosímil por el despliegue del paracaídas en la primera caída (que no se puede volver a colocar en la mochila para un segundo intento en tan poco plazo de tiempo).
El mismo protagonista de la «hazaña» ha explicado en redes sociales junto al vídeo que acompaña el salto que él siempre tenía en mente el salto desde el Red Force (120 metros de altura), desde su puesta en marcha. Y que por edad y otros motivos explicados en su perfil, hasta ahora, con 22 años, no había podido intentarlo.
Explica en las redes que una vez en el suelo se dejó coger por los vigilantes, que lo entregaron a los Mossos. La sentencia explica que los acusados entraron en el parque a las 6.20 horas saltando la valla perimetral de 2.5 metros de altura.
