El Vendrell despide a su Bar Montserrat

Era el local más antiguo que quedaba en la localidad. Numerosos vecinos participaron en la fiesta junto a los castellers, grallers y hasta se le compuso una canción para el recuerdo

19 mayo 2017 23:51 | Actualizado a 20 mayo 2017 21:43
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Ha sido el Bar Montserrat punto de encuentro de la historia de El Vendrell. De cuando el Club de Hockey iba bien y de cuando no. De cuando los castellers Nens del Vendrell tocaban el cielo y de cuando han tenido que volver a levantarse. Casi todo se discutía y resolvía en el Montserrat.

Punto de encuentro de los grallers. De trasnochadores para la última charla y de los que madrugaban y tenían un lugar donde almorzar de cuchillo y tenedor.

«Pero todo tiene un fin», resumía con la cabeza alta Pep Solé, que ha regentado el local las últimas décadas. El Bar Montserrat, al que todos conocían como Cal Guitarra, sobrenombre que ya tenía el padre de Solé, echó ayer el cierre a 45 años de su última época. Antes fue el Bumbulina y también el Montserrat.

 

Nuevo alquiler

La Ley que permite actualizar los alquileres hacía imposible seguir. Son muchos los locales históricos que van a caer en casi todas las localidades. Persianas que guardarán historias para siempre. Así que más valía dejar que el Montserrat quedase en el recuerdo de varias generaciones.

Ayer muchos plasmaron la despedida en las paredes del local. Recuerdos de épocas y de momentos. «Muchos podremos decir que cuando pasó alguna cosa importante, yo estaba en Cal Guitarra».

Para la despedida no faltó nadie. Alcalde y ex alcaldes, concejales, vecinos de otras localidades, vecinos de El Vendrell y hasta el antiguo párroco de la localidad pasó para la despedida popular que tenía dosis de agradecimiento.

Fue el Montserrat casi sede durante años de los castellers Nens del Vendrell, que ayer rindieron un homenaje levantando un pilar de quatre frente al local. Y también un pilar de tres en el hicieron participar al propio Pep Solé. Los castellers llegaron precedidos de los grallers que también tuvieron en Cal Guitarra su punto de encuentro.

Para el recuerdo quedará en sabor de los callos, de la sang i fetge, el conejo en salsa o los pies de cerdo que eran las especialidades del Montserrat. En el bar coincidían trabajadores para almorzar y los que se creían de alta alcurnia.

Hasta una canción tuvo el Montserrat para su despedida. El grupo Son Rumores del que forman parte vecinos, miembros de Lax’n Busto, el cantante Patxi y hasta Pep Solé, han compuesto un tema que recuerda la historia del local.

 

Curro Jiménez y Jordi Pujol

«Mucha gente nos quedamos tirados», dice la letra para rendir homenaje a «aquella taberna cerca de la Nacional» y que fue de los locales con la primera televisión y por donde pasaron vecinos singulares que se conocieron como Curro Jiménez o Jordi Pujol.

Pep Solé mantuvo la compostura, aunque la procesión siempre va por dentro. «Pero todo tiene un principio y un final y el del Cal Guitarra ha llegado».

El local del viejo Bar Montserrat algún día volverá a tener otra actividad. Pero para muchos seguirá siendo Cal Guitarra.

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