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Agents Rurals de la Generalitat (pertenecen al Departament d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural) están investigando la muerte de cuatro cigüeñas blancas (Ciconia ciconia) encontradas entre los días 25 y 28 de agosto en dos fincas agrícolas del término municipal de Cambrils.
Las cuatro aves han fallecido por electrocución y la necropsia realizada (todavía pendiente de los resultados finales) debe aportar indicios por si existe responsabilidad por parte de la compañía titular de la torre de media tensión y del transformador (las muertes han sido en dos puntos distantes de la zona rural de la ciudad) o bien el fallecimiento de los ejemplares adultos fue por una desorientación de las aves y una colisión contra los cables provocando su fallecimiento.
25 y 28 de agosto
El primer caso que se investiga se conoció el pasado 25 de agosto. Un agricultor alertó a la Patrulla Verda de la Policía Local de Cambrils que una cigüeña estaba en el suelo y otra todavía enganchada al cable de una estación transformadora. El ave terminaría ese mismo día cayendo al suelo.
Los Agents Rurals se personaron al día siguiente y ya se encontraron a los dos ejemplares fallecidos a los pies de la instalación eléctrica. Los agentes recogieron las aves y las enviaron al Centre de Fauna Vallcalent (Lleida) para que se les practicara la necropsia y conocer los motivos de su fallecimiento.
Tres días más tarde, también en el término agrícola de Cambrils, otro aviso de la Patrulla Verda de la Policía Local alertaba a los Agents Rurals de dos nuevas cigüeñas fallecidas al pie de una torre eléctrica de media tensión. Ese mismo sábado, los agentes recogieron a los ejemplares electrocutados y los derivaron hasta el centro de Vallcalent para practicarles una necropsia.
Además, se llevaron a cabo fotografías de las dos instalaciones eléctricas para poder elaborar un informe final y establecer las causas de la muerte. Si las pruebas señalan que no fue una desorientación de las aves y las dos estructuras eléctricas son las responsables de su fallecimiento (carecen de protecciones marcadas por ley), la responsabilidad de la electrocución recaería a la compañía responsable de estas estructuras. Y el informe se derivará a la Fiscalía de Medio Ambiente.
Es la ave más perjudicada
La cigüeña se encuentra en esta época del año en periodo de migración hacia el sur, hacia África. Fuentes de Agents Rurals señalan que es una de las especies protegidas que más sufre por la presencia del cableado eléctrico y es la especie que más se electrocuta.
Los datos de los tres últimos años de Catalunya así lo reflejan. En 2018 hubo 300 ejemplares de Ciconia ciconia fallecidos de las 626 aves muertas por electrocución. En 2019 fueron 167 cigüeñas electrocutadas de las 518 aves totales y el pasado año las cifras fueron similares: 177 cigüeñas de 574 fallecimientos por culpa de la electricidad.
