Han pasado casi dos décadas desde que empezó a hablarse del tranvía del Camp de Tarragona. Sin embargo, el proyecto no había llegado nunca a una fase tan avanzada, con una fecha para el inicio de obras marcada en el calendario. Esta está fijada para el próximo verano, cuando se pondrán en marcha los trabajos iniciales de la primera fase que enlazará Cambrils y Vila-seca, de forma que los primeros 14 kilómetros de este tranvía entrarán en funcionamiento el primer trimestre de 2028.
Este es el calendario con el que trabaja el Govern, que este domingo ha escenificado este pistoletazo de salida, que debe suponer pasar de los estudios y los proyectos al inicio de las obras. «Tarragona no necesita polémicas, necesita proyectos», ha afirmado durante la presentación el President de la Generalitat, Salvador Illa, quien se ha mostrado convencido de que este será una actuación «transformadora» para la segunda área metropolitana de Catalunya.
Esta primera fase afecta principalmente al trazado de la antigua vía ferroviaria de la costa, que contará con catorce paradas y tres intercambiadores. La inversión global asciende a 245 millones de euros y las diferentes actuaciones se han dividido en cuatro contratos para agilizar su ejecución.
Esta misma semana está previsto que salgan a licitación los dos primeros proyectos, por un valor total de 55,6 millones. Uno de estos hace referencia a los trabajos previos y estructuras en el tramo Cambrils Centre-Vila-seca Universitat (17,1 millones de euros), de forma que estas obras en la antigua plataforma son las primeras que se pondrán en marcha.
Asimismo, Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) abrirá en los próximos días el concurso para la licitación del contrato correspondiente a la compra del material rodado, que recordemos que quedó desierto. Ahora se ha hecho una revisión de las bases y del precio para la compra de los siete primeros vehículos, con una longitud máxima de 40 metros y una capacidad para 210 personas. Estos contarán con un mínimo de cincuenta asientos, con zonas multifuncionales para bicicletas.
Los convoyes serán en ancho internacional y dispondrán de un sistema de almacenaje de energía, de forma que en algunos tramos podrán circular sin catenaria. En concreto, se ha pactado con los ayuntamientos afectados que las zonas más céntricas serán sin tendido eléctrico.
En total, son tres tramos que suman una longitud de 1,9 kilómetros de los catorce que tendrá el trazado en su totalidad. Estos son el que enlazará Cambrils Centre con la Estació de Cambrils, el de Barenys al Centre de Salou. Finalmente, también será sin catenaria el trazado desde Vila-seca Universitat a Països Catalans.
Para el próximo verano está fijada la licitación del tercer contrato, que podría decirse que es el de más peso. Este hace referencia a la obra civil e instalaciones del tramo Cambrils Centre-Vila-seca Estació, además del centro operativo y los talleres.
Todo en marcha este 2025
Finalmente, antes de acabar el año se prevé que salga el contrato para el tramo Cambrils Centre a Nord, que enlazará con la estación de trenes. Inicialmente, formaba parte de la segunda fase y al incluirse en la primera va un poco más retrasado. Con todo, se prevé que este 2025 todos los contratos de esta fase 1 estén licitados o ya en ejecución.
El director general de Infraestructures de la Mobilitat, David Prat, ha asegurado que este proyecto supondrá «un cambio de paradigma» para un territorio en el que «es muy difícil competir con el vehículo privado».
Con esta inversión quiere incrementarse la cuota modal del transporte público al 25%. De esta forma, se prevé que cuando esté en pleno rendimiento podrá alcanzarse la cifra de 9,5 millones de usuarios al año, teniendo en cuenta que el recorrido se ha diseñado de forma que pasa por los nodos de movilidad del territorio, como los campus universitarios, los hospitales y las estaciones de tren o autobús.
Desde el Govern de la Generalitat se ha hecho un importante esfuerzo para que en el diseño y definición de la infraestructura este sistema tranviario se integre con los entornos urbanos. Al respecto, Prat señaló que esta no tendrá nada que ver con el antiguo modelo ferroviario «poco amable» y que «no hablaba con la ciudad».

Desde la administración catalana se han firmado convenios de financiación con los ayuntamientos afectados por valor de 26,5 millones. El conjunto de estas actuaciones de urbanización deben permitir configurar un eje que facilite tanto la movilidad a pie como en bicicleta.
Durante el acto de presentación, el alcalde de Cambrils, Alfredo Clúa, ha asegurado que este proyecto «transformará la fisonomía de los municipios y ayudará a vertebrar el territorio». Por su parte, el máximo responsable de Salou, Pere Granados, defendió que «después de la brecha del tren, no queríamos que el tranvía continuara con esta división del municipio». Granados mantuvo un pulso con la Generalitat sobre el tranvía. Pese a ello, ayer defendió que este será «moderno, integrado, inclusivo y pensado por las personas».
La flota disponible permitirá establecer frecuencias cada quince minutos en hora punta. Los vehículos alcanzarán una velocidad máxima en los tramos interurbanos de 70 km/h, de forma que según los cálculos iniciales, el trayecto desde Cambrils Centre a Vila-seca podrá hacerse con un tiempo de recorrido de entre 20 y 23 minutos.
En paralelo, también se está trabajando con la tramitación de la segunda fase, que corresponde al enlace con Tarragona y Reus, además del aeropuerto. Este 2025 se prevé cerrar el estudio informativo y de impacto ambiental, para que pueda continuarse con la redacción de los proyectos.