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El centro comercial de Vila-seca comienza a resucitar. El establecimiento, ahora llamado NouPort, cambió de manos el año pasado tras la quiebra del anterior gestor del espacio, Port Halley, y actualmente se encuentra en un profundo período de transformación. BNP Paribas Real Estate, que administrará el equipamiento hasta 2058 –a través de la sociedad mercantil SPV Reoco 13 SL, que obtuvo la licencia–, puso en marcha hace unas semanas unas obras de remodelación que buscan dar un nuevo aspecto al edificio. Al mismo tiempo, la compañía sigue comercializando los múltiples locales vacíos y ya estaría a punto de cerrar los primeros operadores que llegarán al centro comercial en casi diez años.
Así, estos días ya se puede observar como se están pintando los aparcamientos interiores y se están desmontando los locales de restauración que había en la zona de terraza y que cerraron hace años. Unos meses atrás, ya se instalaron los nuevos arcos de entrada y salida en el parking descubierto y próximamente continuarán los trabajos en el resto de áreas. «El objetivo es generar un espacio comercial completamente nuevo con una experiencia de visita vibrante», explica al Diari Pablo Párraga, director de Property Management en BNP Paribas Real Estate, que detalla que se ha querido dar un nuevo concepto arquitectónico basado en el entorno. Así, la decoración se centrará en colores y vegetación mediterráneos y contará con artesanías de barro y enea.
El antiguo Port Halley, denominado ahora NouPort, cambió de manos el año pasado
Aunque desde la compañía no han concretado la cantidad que está invirtiendo en estos trabajos, el compromiso adquirido con el Ayuntamiento al firmar la nueva adjudicación era de inyectar 5 millones de euros en los cinco primeros años de explotación.
Nuevos operadores
«El proyecto está tomando mucha fuerza comercial. Se está trabajando con operadores nacionales y locales», asegura Párraga. En este sentido, afirma que llevan meses «trabajando intensamente» con algunas empresas interesadas en instalarse y que ya hay «varias negociaciones avanzadas». Aunque todavía no desvela ningún nombre, sí avanza que convivirán establecimientos locales junto a cadenas de ámbito nacional, tanto en la zona de restauración como en la de tiendas.
Así, en la terraza se habilitarán entre ocho y nueve locales nuevos destinados a zona gastronómica que servirán para complementar la oferta de Ocine. La idea que trasladan desde la compañía es que habrá una oferta variada, que irá desde la comida rápida o un tipo de local más juvenil, a restaurantes de menú más tradicionales. «Será un espacio totalmente renovado y adaptado a los tiempos», tal y como lo describen sus responsables.
Por otra parte, los nuevos gestores apuestan por integrar el centro comercial en Vila-seca y su área de influencia. De este modo, pretenden promover programas de colaboración entre sus restaurantes y tiendas y escuelas de formación; así como programar actividades relacionadas con la salud o la cultura, además de habilitar espacios de juego para los más pequeños.
En cuanto a los seis negocios que continúan abiertos en las instalaciones de la avenida Alcalde Pere Molas, desde BNP Paribas destacan que todos están interesados en continuar y que ya trabajan en renovarles sus contratos. «El proyecto tiene la suerte de contar ya con operadores muy potentes y el futuro pasa por ir de la mano con ellos y que también mejoren sus establecimientos», exponen. De hecho, según ha podido saber el Diari, alguno de los establecimientos actuales, como Mercadona, ya están planeando una remodelación de su espacio comercial en NouPort.
