El cambrilense Albert Cuenca rinde tributo al amor juvenil

Del ingenio del cambrilense Albert Cuenca (23 años) y de un grupo de alumnos del ciclo de iluminación y producción de l’Escola de Mitjans Audiovisuals de Barcelona, ha nacido la exposición itinerante Amor en braille, una mirada hacia el amor romántico desde un prisma juvenil. La muestra acentúa la idea de que el amor es ciego, de ahí también su carácter inclusivo. La experiencia multisensorial ha transformado las fotografías en creaciones que se pueden tocar, de esta forma se da accesibilidad al público invidente.

El ramillete de trabajos de Cuenca y sus compañeros se puede visitar desde ayer hasta el próximo 26 de septiembre en l’Ateneu Juvenil de Cambrils. De hecho se ha incluido en el Projecte Jove de la concejalía de Joventut del Ayuntamiento. 
«Exponer en Cambrils era algo que tenía en mente desde el principio. Familiares y amigos me preguntaban por ello y, por fin, podemos traerla aquí», refleja Albert Cuenca, un aspirante a fotógrafo profesional que ya exhibe su faceta artística en una primera exposición con recorrido.

Amor en braille ha visitado varias salas de Barcelona con apenas seis meses de vida y luz. El espacio de la Sala Sagnier o el Festival Street Art la han captado. «Teníamos que enviar información sobre el proyecto y siempre lo han aceptado sin problemas. Cuando hicimos ese trabajo para el ciclo de la EMAV pensamos que podría tener más recorrido y la verdad es que estamos contentos», corrobora el cambrilense.

La composición de Cuenca y ocho jóvenes estudiantes de la zona de Barcelona mezcla fotografía, vídeo arte e iluminación. Se gestó después de una serie de entrevistas con jóvenes externos que completaron la visión del amor desde distintos puntos de vista. Las  ilustraciones se arropan en el estilo del retrato simbólico y cuentan con un toque moderno diferencial.

Las láminas 3d y el sentido táctil de las imágenes provocan que el arte de estos jóvenes estudiantes haya convertido lo invisible en totalmente visible. Que el amor ciego que tanto quieren resaltar, acentúe solamente el sentimiento y no las limitaciones físicas de las personas. 

Pasión por la foto

Albert Cuenca se ha criado en el barrio de l’ Eixample de Cambrils y desde la infancia no ha ocultado su pasión por la vertiente del arte y su vocación por la fotografía, precisamente dedicarse desde un punto de vista profesional a la elaboración de imágenes es su propósito. 
«Ahora mismo estoy trabajando en el departamento de producción de un teatro, pero quiero enfocar mi carrera hacia la fotografía», reafirma.

La exposición Amor en braille ofrece pinceladas del nivel creativo que el cambrilense puede alcanzar. Su juventud todavía le da permiso de evolución con mucho margen. Pocas veces una labor de formación como el proyecto Amor en braille disfruta de tanto trayecto. Y es que, probablemente, después de la parada en la villa marinera, la muestra gozará de nuevos destinos a nivel de Catalunya.

«Queremos rodar más después de Cambrils. Tenemos varias opciones abiertas y esperamos concretarlas», finaliza el artista local.
Albert Cuenca vio como ayer, su primera obra, aterrizó en casa, con un trabajo de varios meses de generación y mucha minuciosidad. El mismo creador se personó para montar la exposición que se abrió al público con el afán de captar la atención de una audiencia variada y amplia en franjas de edad.