Cara y cruz para la actuación de Melody, que arrasa en audiencias pero se enquista en las últimas posiciones
La cantante no reacciona ante la prensa, mientras el triunfo de Austria tiene sello español

La cantante Melody representando a España en el Festival de 2025.
La antepenúltima posición de Melody en Eurovisión 2025 cayó como un jarro de agua fría entre los eurofans españoles. Ni los peores pronósticos preveían que la artífice de Esa diva quedase tercera por la cola (puesto 24 de 26), solo por delante de los representantes de Islandia y San Marino, a pesar de que las principales casas de apuestas habían aupado a la artista sevillana en los últimos días tras su actuación en los ensayos.
El micrófono de cristal se decidió al límite entre Israel y Austria, que se alzó con la victoria gracias al cantante Johannes Pietsch y su canción Wasted Love, un tema de ópera-pop muy especial en el que el joven Pietsch demostró una gran capacidad vocal.
La de Dos Hermanas empeoró incluso la posición de Nebulossa en la edición pasada. Los intérpretes de Zorra quedaron en el puesto 22, mientras que un año antes Blanca Paloma se conformó con la decimoséptima posición. En 2022, Chanel y su icónico Slomo fueron la excepción, logrando un tercer lugar.
La reacción de Melody tras conocer su resultado no se hizo esperar. La cantante no ofreció declaraciones a los medios que la esperaban en Basilea, ni participó en el especial que TVE realizó desde Dos Hermanas, algo que sus predecesores sí habían hecho. Ella, sin embargo, optó por un enigmático vídeo publicado en redes sociales: “Estoy muy satisfecha porque nosotros hemos ganado. ¡Viva el arte y la música, aunque a veces prevalezcan otras cosas!”, valoró la cantante, que finalmente regresó a España por su cuenta y no junto a la delegación española.
Escena y coreografía
Entretanto, el representante austríaco se alzó con la primera posición con un total de 428 puntos tras la suma del televoto y del jurado, adelantando en el último suspiro a Israel (357) y Estonia (356), que ocuparon el segundo y tercer lugar, respectivamente.
La actuación de Johannes Pietsch, conocido artísticamente como JJ, tuvo sello español, ya que contó con la participación del escenógrafo ilicitano Sergio Jaén y el coreógrafo malagueño Borja Rueda. Ambos diseñaron un show en blanco y negro sobre el escenario de Basilea que dejó boquiabierto al público europeo.
Con tan solo 24 años, JJ se llevó el micrófono de cristal que lo acredita como ganador de Eurovisión, y aprovechó el momento para lanzar un emotivo alegato: “El amor es la fuerza más poderosa del mundo. Difundamos más amor”, apuntó el artista, abiertamente queer.
La audiencia, con Melody
Eurovisión se consolidó como el evento no deportivo más visto del año. La 1 logró un impresionante resultado de audiencia que demostró el gran interés del país por la candidatura de Melody. Más de 5,8 millones de espectadores y un 50,1 % de cuota de pantalla siguieron una gala que comenzó a las 21:00 y se prolongó durante casi cuatro horas.
En el momento de las votaciones, los datos se dispararon aún más: 6.315.000 espectadores y un 59,7 % de 'share' se mantuvieron frente al televisor pendientes de si Austria o Israel se llevaban el micrófono de cristal.
La cadena pública cerró la jornada del sábado con un 25,9 % de cuota, arrasando a Antena 3 (8,7 %) y Telecinco (6,1 %). El programa posterior a la gala, La noche de Melody, también obtuvo grandes cifras (36,6 % de cuota) con su especial desde Dos Hermanas, según datos de la consultora Dos30’.
Además, la final de Melody fue la más vista en la historia de RTVE Play, con 839.544 visitantes únicos, duplicando la cifra de 2024 (+103 %) y superando en un 46,6 % el récord de 2022 con Chanel.
En concreto, la artista sevillana mejoró en casi diez puntos la audiencia respecto a Eurovisión 2024, cuando Nebulossa y su polémico Zorra obtuvieron un 41,8 % de cuota y 4.886.000 espectadores. Es el mejor dato desde la edición de Chanel, que en 2022 alcanzó un 50,8 % de cuota y 6.835.000 televidentes. Sin embargo, la actuación de Rosa López en 2002, con su canción Europe’s living a celebration, sigue siendo la más vista del siglo, con un 80,4 % de cuota y 12.755.000 espectadores.