Ernest Prunera gana el Nèstor Luján de novela histórica con ‘Quan s’allunyi la tempesta’
Ambientada en un Imperio carolingio en decadencia, tiene a Guifré el Pilós como uno de sus personajes

Ernest Prunera.
El periodista y escritor Ernest Prunera (Sabadell, 1973) ha ganado el XXIX Premio Nèstor Luján de novela histórica con Quan s’allunyi la tempesta (Columna). La obra, ambientada en un Imperio carolingio en decadencia, se enfoca en las luchas de poder y las relaciones personales. En este escenario, Marwan, un joven musulmán, es capturado por los cristianos y convertido en tutor de un niño reservado y obstinado, quien en el futuro será conocido como Guifré el Pilós. Prunera afirma que ganar el premio representa un reconocimiento «absoluto» al tiempo dedicado al proyecto. «Para mí, esta es la novela que me lanza hacia una división superior dentro de la literatura y la escritura», sostiene.
La trama transcurre entre los años 843 y 848. El Imperio carolingio se fragmenta tras la muerte de Lluís el Pietós y las luchas entre sus sucesores sacuden toda Europa. Al sur, la Marca Hispánica –tierra fronteriza entre cristianos y musulmanes– se convierte en un territorio en disputa, azotado por incursiones sarracenas, conspiraciones nobiliarias y ambiciones de reyes lejanos. En este contexto convulso –donde el poder cambia de manos y la lealtad se mide con espadas– un joven musulmán, hijo de un gobernador sarraceno y amante de los libros, es obligado a ir a la guerra y finalmente capturado. A partir de entonces es nombrado preceptor del hijo mayor del conde Sunifred, señor de Urgell y la Cerdanya. Será conocido un día como Guifré el Pilós.
El autor –que publicó en 2020 L’or del rei– regresa cinco años después con una nueva historia ambientada en el siglo IX, que pone el acento en temas como los conflictos, la redención, el peso de los errores o la fragilidad de la paz. Aunque no considera que sea una novela «de aventuras», sí deja claro que suceden muchas cosas centradas en las relaciones humanas, articuladas a través de varios personajes, entre ellos Marwan, el protagonista principal. Aunque reconoce que en un principio quería hacer una obra centrada en la biografía de Guifré el Pilós, admite que la información encontrada era muy escasa para construir un relato sólido. Todo ello derivó finalmente en una novela, en la que Guifré es solo uno de los personajes. «Fueron surgiendo tramas, acciones, y al final terminó saliendo Quan s’allunyi la tempesta», explica.
Para el escritor, escribir novela histórica le obliga a ser más «rígido» en comparación con otros géneros, y además requiere una documentación mucho más extensa. «No solo por la investigación de los hechos, sino también por el aspecto social: cómo vivía la gente, qué comía, qué enfermedades existían...», señala, «es posible que haya algún detalle inexacto, aunque he intentado ser riguroso». Prunera cree que lo que fascina al público al leer novela histórica es la posibilidad de «viajar en el tiempo con la imaginación». «En mi caso, me gusta escribir novela centrada en Catalunya, sobre el país que fue y de dónde venimos», relata, aunque añade que en esta obra no hay ninguna referencia explícita en ese sentido. «No aparece ni Catalunya ni los catalanes, porque no tiene ese objetivo reivindicativo», detalla.