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Las promesas están para cumplirlas y eso es lo que han hecho este fin de semana dos grupos de seguidores del Nàstic que se comprometieron a largas caminatas si el equipo grana lograba salvar la categoría.
Por un lado Óscar Uceda, Carmelo Vega y Antonio Moreno, tres amigos y compañeros de fatigas en Gol Nord que pactaron recorrer a pie los 34 kilómetros que separan el Vendrell del Nou Estadi si se consumaba el milagro de la salvación.
Milagro porque la cosa pintaba mal. El equipo de Juan Merino no acababa de funcionar y el Nàstic se hundía entre las posiciones de descenso. En medio del desánimo, los tres amigos lanzaron el desafío.
Fue una bravuconada dentro del pesimismo que les envolvía tras ver como el equipo era incapaz de ganar en el Nou Estadi en las últimas jornadas.
El compromiso se ‘oficializó’ en Vallecas. La derrota grana y la destitución del técnico andaluz les llevó a confiarse en la habilidad de Nano Rivas para llevar a obrar el milagro. Un último clavo ardiendo antes de dejarse caer de nuevo al fuego de Segunda B.
Con el entrenador manchego el Nàstic reaccionó. Ganó a Girona (3-1) en el Nou Estadai y al Tenerife (0-1) en el Heliodoro Rodríguez López. Óscar y sus amigos comenzaron a hacerse a la idea de que deberían cumplir con su promesa.
Han tardado ocho horas en recorrer a pie los 34 kilómetros desde El Vendrell hasta el Nou Estadi
Como el resto de nastiqueros, acudieron al Nou Estadi para ver el Nàstic-UCAM Murcia con un nudo en el estómago provocado por los nervios. Desde sus asientos en Gol Muntanya se desesperaron cuando el colegiado indicó penalti en contra.
«No sabíamos qué hacer porque nos veíamos en el barro de la Segunda B, sufriendo en esos campos, en el pozo maldito sin saber los años q nos costaría salir de él», comenta Óscar Uceda. Pero apareció Manolo Reina. El malagueño estiró su cuerpo para despejar el lanzamiento de Jona y levantar un profundo suspiro de alivio en la grada. En Gol Nord hubo lágrimas. Imposible aguantar tanta emoción.
Los tres amigos no respiraron tranquilos hasta que Barreiro, en la portería que tienen más cercana, marcó «el gol del gusano, como lo bauticé», dice Óscar. Tras los abrazos vino el momento de reafirmar su compromiso. «Lo haremos», dijeron los tres.
Vestidos con una camiseta expresamente preparada para la ocasión –dedicada para el técnico de la salvación ‘Nano, tu calva nos iluminó el camino’– a las 7.00 horas de este domingo, Óscar, Antonio y Carmelo cargaron las mochilas y salieron del Vendrell para después de 34 kilómetros y ocho horas celebrar la promesa cumplida en la misma puerta del Nou Estadi.
Caminata a Sant Magí de la Brufaganya
No han sido los únicos 'nastiquers' que han cumplido su promesa. Otro grupo de una veintena de aficionados también han llevado a cabo su promesa de recorrer, en dos etapas, los 66 kilómetros que separan la ermita de Sant Magí de la Brufaganya y la parroquia de Sant Magí de Tarragona por la salvación del Nàstic. El presidente Josep Maria Andreu les acompañó a su llegada.
