Denis Silva: 'Aleñà me enseñó el estilo del Barça'

Se os ha escapado la liga por un punto ante un sorprendente Zaragoza.
Pensamos que la ganaríamos. De hecho la perdimos en el último suspiro, con el gol que marcó el Zaragoza al Reus a falta de cuatro minutos.

¿Es difícil encajar una derrota cuando al Juvenil del Barça se le exige ganarlo todo?
El escudo del Barça te obliga. No hace falta que te digan que tienes que ganar todos los partidos. Es el peso del club lo que te lleva a ganarlo todo. 

¿En la UEFA Youth League (Champions Juvenil) sí vais camino de ganarla?
Es un curso muy marcado por la UEFA Youth League. Se le da mucha importancia a esta competición. No solamente a nivel institucional, por el club, los jugadores y el staff técnico también. Es un torneo diferente. El Barça lleva tres años seguidos llegando a Nyon, donde se juega la Final Four y eso es destacable.

El rival en semifinales es el Chelsea. ¿Es la final anticipada?
Es la final del año pasado. Además, son los equipos más fuertes de la competición estadísticamente con dos títulos cada uno. Tocará competir ante un conjunto muy fuerte, rápido por fuera y experimentado. Creo que repetirán ocho jugadores de la temporada pasada. Pero claro que esperamos pasar a la final.

¿Cómo es la experiencia de participar en la UEFA Youth League?
Desde fuera no te esperas que sea una competición tan grande y lo es en muchos aspectos. Son experiencias bonitas como entrenador y persona. Viajar con el primer equipo, competir contra entrenadores como Van Nistelrooij (PSV) o Motta (PSG). Te hace gracia conocerlos. En la liga todos jugamos de una manera similar, pero cuando viajas fuera ves otra manera de concebir el fútbol. Otro ritmo y otros sistemas. Aprendes mucho. Los jugadores ofrecen su nivel real. 

¿Te costó adaptarte al estilo Barça?
Mucho. Llevo 9 temporadas y creo que nunca llegaré a entenderlo de todo. A mí Aleñà con 13 años me enseñó el estilo del Barça. Llegué el primer día, Albert Puig me dijo cuatro cosas y salté al campo a entrenar. Dani Morer, Olmo y Carles Aleñà me mostraron la esencia del fútbol azulgrana. Hago mía una frase de Paco Seirul·lo: «Los verdaderos maestros del fútbol del Barça son los jugadores».

Te has pasado toda tu vida en canteras, ¿te consideras un entrenador del fútbol formativo?
Llevo desde los 18 años entrenando chavales. Comencé en el Lleida, después infantiles y cadetes del Nàstic, de allí me fui al Atlético de Madrid y ahora en el Barça donde he entrenado al Infantil B y A, Juvenil B y este año Juvenil A con los mismo jugadores que  cogí cuando eran infantiles. Seguir en este nivel es un sueño. Me siento un privilegiado y espero estar muchos años aquí. Me gusta incluso más que el Barça B.

¿Es una quinta en la ningún jugador ha tenido que soportar la etiqueta de ‘perla’?
Estas quintas que nadie sobresale y trabaja con tranquilidad son las buenas. Cuando alguien destaca, puede hacer inferior al resto. Y luego no es así. Mira que pasó con Lee. Hasta que no llegan a Juveniles el potencial es engañoso. 

Pues menuda responsabilidad para el entrenador de juvenil.
Sí, pero el Barça es un club muy grande y tenemos gente trabajando por encima nuestro. Guillermo Amor, Bakero, Pep Segura, etc. El entrenador hace el día a día y las alineaciones pero las decisiones se toman en coordinación.  

Uno de los jugadores que más destacan es el tarraconense Guillem Jaime. ¿Le ves techo alguno?
A Guillem lo conozco de alevín y siempre ha sido uno de los jugadores importantes del equipo. Eso quiere decir mucho. Es un ejemplo, por eso luce muchas veces el brazalete de capitán. Ningún jugador del Barça tiene techo. Si están es porque son lo mejor de lo mejor. Ellos se ponen el límite.

Guardiola, Tito, Tata Martino, Luis Enrique, Valverde, etc. ¿Esos relevos en el banquillo del primer equipo se nota en la base?
El estilo es el mismo, el que impulsó Johan Cruyff, pero los matices de cada entrenador influyen. Recuerdo cuando Guardiola puso a Messi de falso nueve yo lo imité con Anssumane Fati.

¿Alguien marca esa directriz?
No, no, pero vas al Camp Nou lo ves y te influye. Directamente o indirectamente.