El 2015 desata a los delanteros del Nàstic

Lago Júnior sumó el domingo sus dos primeros goles de la temporada. En este año, los atacantes granas han anotado una decena de tantos

19 mayo 2017 23:30 | Actualizado a 22 mayo 2017 21:41
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El gol, o más bien su ausencia, fue una de las desesperaciones de principio de curso. La falta de eficacia copaba las conversaciones cafeteras sobre el Nàstic. Una crítica que afectaba especialmente a los delanteros granas. Ni Marcos, ni Lago Júnior –los dos máximos goleadores de la pasada temporada– veían puerta y el rol goleador lo asumían otros compañeros, como Rocha (autor de cinco tantos).

El 2015 ha recuperado el olfato goleador de los depredadores del área granas. Más fruto de la progresión del equipo que de la casualidad. Como se decía en plena crisis anotadora, «al final, los goles han acabado entrando».

Desde enero, el Nàstic ha logrado 12 goles en las siete jornadas disputadas. Seis menos que los 18 que sumaron en el primer tramo de liga, correspondiente al 2014, pero con menos de la mitad de jornadas. De una media de gol por partido a una de 1,72 goles por encuentro.

Otro dato:de los siete partidos que el equipo de Vicente Moreno lleva en este 2015 solo ha dejado de marcar en uno, ante L’Hospitalet de Kiko Ramírez en el Nou Estadi. Y en los dos últimos, los granas han sumado seis goles. Dos partidos (Hércules y Valencia Mestalla) que han ayudado para liberar cualquier tipo de ansiedad que quedara entre sus atacantes.

Una mejora cuya responsabilidad es en gran medida de los atacantes de la plantilla que en los dos primeros meses del año han reencontrado su relación con el gol.

Porque, a pesar del enorme desgaste defensivo que Vicente Moreno exige a todos sus hombres, incluidos los delanteros, éstos solo son destacados por su acierto de cara al gol. Si no marcan, lo mismo da el trabajo en parcelas menos agraciadas. El atacante vive del gol y cuando no llega la ansiedad va en aumento. En la afición y en el propio jugador.

Por eso Lago Júnior explotó tras anotar su primera diana del campeonato ante el Valencia Mestalla. Lo necesitaba. Su gran trabajo, en la recuperación de balones y ayudas defensivas así como en las asistencias de gol, quedaba desfigurado por el ‘0’ de su casillero de goles. Impropio para el ‘pichichi’ grana de la 2013-14. Aunque ya había marcado, Rayco, que como el resto del vestuario y experimentado en eso de la necesidad del delantero, quiso premiar al marfileño cediendo el lanzamiento del penalti en el 85’. Con dobletes todo se olvida más fácilmente. Así que Lago disparó desde los once metros para sentenciar el choque y alejar a los fantasmas de la sequía. La portería, que se hacía cada vez más pequeña ante la falta de gol, volvió a sus dimensiones normales.

Una misma situación vivió Marcos De la Espada. Tardó en llegar el primer gol y ya suma seis goles esta temporada, cuatro de los cuales los ha logrado ya en el 2015. Anotó frente al Villarreal B, ante el Atlético Baleares y un doblete en el estadio José Rico Pérez de Alicante contra el Hércules.

Rayco, máximo goleador del Nàstic, ha sido más regular que sus compañeros en su relación con el gol. Lleva nueve, cinco en el 2014 y cuatro en lo que va de 2015.

Jean Luc, Azkorra, Xisco Muñoz y Luismi (cuando se recupere) son los únicos que faltan por estrenarse en este año.

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