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El Reus se quedó sin su ansiada final de Copa del Rey tras caer por un contundente 3-6 en las semifinales ante el Barça. Los rojinegros se avanzaron en el luminoso en las compases iniciales del partido, pero los azulgranas respondieron con una cascada de goles que sentenciaron el partido a la media parte. Los reusenses solamente consiguieron recortar las distancias tras el descanso.
El partido empezó de cara para los intereses rojinegros. Cuando no se habían disputado ni 60 segundos, el conjunto reusense se adelantó en el marcador. Marc Julià no desperdició la falta directa y dio el primer golpe en el encuentro.
La resistencia duró poco. Los azulgranas su pusieron el mono de trabajo y borraron de la pista al Reus. Pau Bargalló le devolvió el golpe a los rojinegros con un gol también de falta directa. La pelota parada fue de nuevo la protagonista en el 1-2 de los barcelonenses. En esta ocasión, Pablo Federico Álvarez transformó la oportunidad y dio la vuelta al luminoso.
El aluvión de goles no se detuvo en ese momento. Sergi Llorca primero e Ignacio Abalart después, pusieron el camino a la final cuesta arriba para los reusenses.
Pese al resultado adverso, los jugadores entrenados por Jordi García no bajaron los brazos. Una conducción de Álex Rodríguez terminó en un trallazo imparable para el guardameta azulgranas y devolvió las esperanzas a un Reus que cada vez se encontraba mejor sobre la pista.
Cuando los rojinegros estaban mejor, el Barça les asestó un golpe casi definitivo. Al filo del descanso, un pase de Pau Bargalló dejó prácticamente solo a Joao Rodrigues, que anotó el 2-5 sin apenas despeinarse.
Fuera de la final
En la reanudación, el maratón de goles cesó. Los reusenses recortaron distancias en el ecuador de la segunda parte, pero el billete para la final ya era para el Barcelona.
Los azulgranas disputarán la final este mediodía a las 13:15 horas ante el Liceo. Ambos, ya se vieron las caras en las dos anteriores finales, que terminaron con alegría para los catalanes. El Barça es el club con más Copas del Rey, mientras que el Liceo es el tercero, con nueve títulos en sus vitrinas.
