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La psicosis desde los 11 metros distingue al Reus en el último año. De diez disparos, los rojinegros han malgastado siete. Un registro negativo demoledor , poco habitual en el mundillo profesional futbolero. Dos aciertos de Edgar Hernández, curiosamente los dos ante el Getafe, y uno de Jorge Díaz ante el Sevilla Atlético, completaron la nómina positiva. Del resto, manos a la cabeza. De esos siete errores, cinco son consecutivos y con cuatro lanzadores distintos; Ricardo, Edgar, Álex Menéndez y Querol. Desde el 5 de febrero, cuando Hernández convirtió ante el Getafe, no se conocen celebraciones desde el punto de penalti.
Los dos fallos en el mismo partido de Copa ante el Sporting, este miércoles, han agraviado un problema que se arropa en lo psicológico. Edgar Hernández y Menéndez confirmaron que Garai va a perder energía en un trabajo emocional necesario para remediar una situación que cuesta puntos. Además de esos cinco fallos seguidos, antes, Jorge y Miramón, desperdiciaron otros dos lanzamientos (Almería y Mallorca).
Los rojinegros se encuentran a un paso de alcanzar el récord que ahora mismo posee el Atlético de Madrid, que entre 2016 y 2017, desperdició un total de seis penaltis consecutivos y con cinco lanzadores distintos, Torres, Gabi, Griezmann, Thomas y Carrasco. También con dos intentos al limbo consecutivos en un mismo partido ante Osasuna, el pasado curso. El Atlético no hizo más que igualar el registro que había situado al Alavés en la pole de errores en 2002.
Resulta curioso ver cómo una acción que debe significar muchísima ventaja para el favorecido se convierte en una pesadilla en algunas ocasiones. El Reus no se trata del único caso de desesperación.
La pesadilla de Palermo
Un 4 de julio de 1999 no solamente pasó a la historia por la clara victoria de Colombia ante la selección argentina por 3-0 en la Copa América. Aquel día, el delantero de la albiceleste, Martín Palermo, un atacante poderoso en lo físico, llegó a desperdiciar hasta tres penas máximas en 90 minutos de juego. Aquella Copa América tuvo lugar en Paraguay y el trayecto de Palermo con Argentina quedó señalado.De esos tres penaltis, sólo el tercero fue adivinado por el meta colombiano. El primero chocó con el travesaño y el segundo salió alto.
Hasta los más grandes de todos los tiempos han vivido sus desencuentros particulares con el punto de penalti. Diego Maradona llegó a fallar hasta cinco lanzamientos consecutivos con la camiseta de Boca en el Torneo Clausura de 1996. Inmerso en una carrera vertiginosa. Bilardo lideraba a aquel equipo que peleaba codo a codo por el campeonato con los históricos Vélez y Gimnasia.
El Reus desea escapar cuanto antes de esos números depresivos. Joan Oliver, en rueda de prensa intentó sacarle hierro al asunto. «En esta nueva temporada, además de fallar ocasiones, hemos fallado tres penaltis, algo que tiene su mérito». En todo caso, el máximo accionista y los hinchas esperan que esa dinámica se modifique cuantos antes. Urge arreglarlo para que el futuro rebose optimismo.
