El Estadi puede ser un polvorín contra el Consejo

El Reus vuelve al Estadi este sábado envuelto en un ambiente de difícil respirar. El club se mantiene a la deriva a la espera de que Joan Oliver pueda solucionar el problema de subsistencia económica con la venta de parte de sus acciones, más del 90 por ciento, para que pueda entrar nueva inversión. Tiene poco más de un mes para hacerlo sino quiere que los jugadores denuncien. Llevan ya dos meses sin cobrar.

Ante esa situación de incerteza, los aficionados tampoco han querido quedarse callados. Existe, en los últimos días, una corriente en las redes sociales que apunta a protesta grande el sábado, en el partido que el Reus va a disputar ante el Extremadura, a partir de las 18.00 horas. Varios hinchas han promovido una protesta contra el Consejo de Administración que encabeza Oliver para pedir soluciones urgentes. 

Carteles de ‘se vende’
Incluso para ilustrar la protesta se van a repartir y mostrar carteles de «se vende», en referencia a la operación que Oliver debe realizar para que el club sea viable en un futuro. Parte de estos hinchas no han dejado de mostrar su decepción con el actual Consejo de Administración debido a la situación delicada que vive el Reus y también su plantilla.

Hasta hoy, los adeptos siempre han mantenido un tono de respecto hacia la zona del palco, donde Oliver y el resto de la planta noble ven en directo los partidos. Parece que este sábado ese clima de calma se va a terminar. La afición del Reus pide soluciones a un problema que, a medida que pasan los días, se hace más grande. El equipo, además, ha entrado en una situación deportiva inestable.

En zona de descenso
Después de la victoria del Zaragoza en Tarragona, este lunes, el Reus ha caído a la zona de descenso de la clasificación. Ocupa el lugar 19, aunque es verdad que, con 13 puntos, está empatado con otros dos equipos, Lugo y Tenerife. El partido de este sábado ante el Extremadura, rival directo en la zona baja de la clasificación, toma un aire de máxima importancia.

Plantilla y cuerpo técnico regresaron ayer al trabajo inmersos en la misma situación que hace unas semanas. Nada ha cambiado para ellos, tampoco para los trabajadores del club, a los que también se les adeudan dos nóminas.