El Nàstic, a la conquista del temido Castalia

Castalia es uno de esos escenarios que fulmina incertidumbres con una naturalidad pasmosa. Allí no se puede salir arropado en temores. O comparece uno con las ideas claras o sale de allí escaldado. Porque el ambiente que se genera en el feudo de Castellón no es habitual en 2ªB. Colapsa un escenario majestuoso jornada tras jornada y respalda a su equipo en tiempos de sonrisas y en tiempos de lágrimas. 12.583 espectadores de media tiene este año. Una cifra descomunal e irreal para la categoría de bronce. El Castellón está en 2ªB, pero su masa social es de una categoría o incluso un par de categorías por encima.

El Nàstic acude a este feudo en un buen estado de forma. Ya no existen sospechas sobre el rostro que va a mostrar el conjunto de Toni Seligrat en sus comparecencias. No es casualidad que los tarraconenses estén invictos en este 2020. Son ya siete partidos sin perder en este año nuevo y su dinámica en la segunda vuelta le coloca como el sexto mejor equipo del grupo III. Dos victorias y cuatro empates han convertido al Nàstic en un equipo muy difícil de batir, pero que tampoco asegura una victoria. Punto a punto está marchándose de un descenso que le persiguió con mucha insistencia durante los primeros meses de competición.

Una victoria en Castalia supondría un golpe en la mesa de dimensiones brutales para los intereses granas. El Nàstic se alejaría todavía más del descenso y la confianza subiría mucho tras ganar en un feudo imponente como es el castellonense. 
Para el encuentro de esta tarde, Seligrat tiene un serio problema en la medular. Solo dispone de dos mediocentros naturales de la primera plantilla. David Goldar y Fausto Tienza cayeron lesionados ante el Lleida, por lo que Fran Miranda y Javi Márquez jugarán en el doble pivote. El primero es indiscutible, pero el segundo llega tras estar un mes en el dique seco. En el banquillo estará el canterano Óscar Sanz, para refrescar la sala de máquinas en caso de que el técnico de Torrent lo considere oportuno. 

El resto del once inicial no va a presentar novedades respecto al elegido frente al Lleida. El equipo está cómodo en el 4-4-2 y está demostrando una gran fiabilidad defensiva. En ataque falta generar más ocasiones, pero se tiene la esperanza de que Javi Márquez le de otro ritmo al equipo sobre todo en fase ofensiva. 

Un Castellón en play off

El Castellón llega al encuentro ante el Nàstic en una tercera posición que le tiene muy ilusionado en sus aspiraciones de jugar play off. Como local tampoco deja dudas y es el tercer equipo con más puntos cosechados (27) en todo el grupo III. 
En todo caso, no llega en su mejor momento en lo que va de temporada. La jornada pasada no fue capaz de superar al Badalona y no completó una actuación demasiado convicente.