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La implantación de la tecnología de la línea de gol en España está aún lejos de aplicarse. Mientras las grandes ligas europeas (Premier League, Seria A, Bundesliga y Ligue 1) ya utilizan este sistema, así como la UEFA lo ha hecho en la Supercopa de Europa, en la Eurocopa y próximamente en la Champions League, LaLiga se resistirá al menos una temporada más.
Javier Tebas, presidente de la competición española, no quiere abonar a la FIFA los 4 millones de euros que exige como canon por utilizar alguno de los dos sistemas homologados del ‘ojo de halcón’. Se trata de una cantidad mínima en comparación a los 1.500 millones que cobran los clubes por los derechos de televisión o los aproximadamente 600 millones de presupuesto del que presumen los poderosos Real Madrid o Barcelona.
Se utilizan siete cámaras en las porterías y un software de seguimiento del balón dentro del área de gol. El ‘ojo de halcón’ determina si la pelota rebasa por completo la línea de meta. La tecnología permite que en apenas un segundo el sistema envíe una señal vibratoria a cada uno de los árbitros del partido en caso de que el balón entre. La FIFA también ha homologado el ‘GoalRef’.
El mayor problema para los clubes es el coste, ya que representa una inversión de entre 250.000 y 500.000 euros por equipo. El Delegat en Tarragona de la Federació Catalana de Futbol, Josep Vives, considera que el desembolso que representaría para los clubs la adquisición de las cámaras y los sistemas «no puede ser excusa, después de ver las cifras que se mueven con los contratos de los jugadores» y mucho menos «en la considerada como la mejor liga del mundo».
El discurso se sostiene para los grandes equipos de Primera, pero para los de Segunda, como Nàstic y CF Reus, ese coste representa una suma importante de su presupuesto anual. Emilio Viqueira, director deportivo de la entidad grana cuestiona la necesidad de invertir esa cantidad para las escasas situaciones en las que se produce. «En cuatro años sólo hemos tenido un ‘no-gol’», explica.
La ocurrido el domingo en el Benito Villamarín, con ese claro gol del Barça no concedido porque ni el asistente ni el árbitro canario Hernández Hernández vieron que el bético Mandi despejó el balón medio metro dentro de la portería, colisiona con el hecho de presumir de que LaLiga es el mejor campeonato del mundo. Puede tener a los mejores jugadores y equipos, pero organizativamente aún es deficiente.
Actas deficientes
La deficiente imagen del fútbol español, sobre la que bromeó al brasileño Neymar al acompañar las imágenes de una carcajada en las redes sociales, se vio agravado por la coincidencia de que a la misma hora Rafa Nadal perdía la final del Open de Australia ante el suizo Roger Federer tras un punto en el que el manacorense pidió el ‘ojo de halcón’ para comprobar si la última pelota había entrado o no.
La Liga argumenta que dispone de un sistema Media Coach, gestionado por Mediapro, por el cual estos goles fantasma ya no serían polémicos y se analizarían al instante. Incluido en la comisión sobre el videorbitraje en el seno de la FIFA, el organismo que preside por Javier Tebas celebra frecuentes reuniones, las últimas en Amsterdam y Nueva York, y participa de un estudio con 15 sistemas diferentes que se podrían elegir sin tener que pasar por caja, según informa el exárbitro vasco Iturralde González en el diario As.
Previo acuerdo con la Federación, LaLiga pretende impulsar el videoarbitraje (Video Assistant Referee, que se utilizó con polémica en el Mundial de Clubes) a modo de prueba en la Copa del Rey de la próxima temporada. Ya se han iniciado las conversaciones pertinentes con el comité de arbitraje de fútbol profesional. Al igual que la Premier y la Bundesliga.
