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El Reus dio un golpe de autoridad en la OK Liga goleando con solvencia al Noia a domicilio y poniendo tierra de por medio con la cuarta plaza, que estaba en manos del equipo barcelonés –el Girona se la ha arrebatado esta jornada–. Los de Jordi Garcia sumaron un triunfo claro y convincente que les consolida en el tercer puesto. Ambos equipos firmaron un inicio vibrante y lleno de equilibrio. El Noia, bien plantado en defensa, contuvo bien las acometidas reusenses. En el minuto 20 se produjo un punto de inflexión. El árbitro decretó tarjeta azul a Martí Casas por una obstrucción a Raül Marín en una salida de pelota. Marín ejecutó la falta directa y abrió el marcador (0-1) a cinco minutos del decanso.
Ni mucho menos se vino abajo el Noia con la desventaja. Los locales tuvieron una falta directa en la recta final del primer periodo pero Càndid Ballart, meta del Reus, evitó el empate, como lo hizo en todo momento gracias a sus eficaces intervenciones.
En la reanudación, misma dinámica. El Noia buscaba el empate con insistencia pero se topó con la defensa del Reus y nuevamente con un inspirado Ballart. Pero los de la capital del Baix Camp pusieron la réplica. Albert Casanovas culminó un ataque desde la derecha con un pase al segundo palo para que Romà Bancells subiera el 0-2 al marcador.
A partir de ahí, el encuentro se tranquilizó para un Reus que buscó posesiones más largas y que tuvo tiempo de sentenciar. Marín transformó otra falta directa en el 0-3 y Àlex Rodríguez redondeó la goleada para los de Jordi Garcia, que dieron un recital de oficio y saber estar para sellar la tercero plaza en un feudo difícil.
