El Reus salva un punto en Taradell

El Reus tuvo que conformarse con un empate al borde del precipicio en la pista del Taradell, uno de los equipos destinados a pelear por eludir el descenso. Los de Jordi Garcia se encontraron un partido totalmente igualado, en el que siempre fueron a remolque en el marcador, ante un rival defensivamente muy bien organizado. El gol de Àlex Rodríguez a falta de poco más de dos minutos para el final otorgó botín a los rojinegros, que se siguen mostrando irregulares en el campeonato doméstico, en el que no han logrado establecer una línea continua a su rendimiento.

Los de Jordi Garcia no lograron superar el partido cerrado que les propuso el Taradell, muy coherente con su trabajo defensivo, solidario y sin apenas conceder facilidades. Además, los locales encontraron el gol gracias a Marc Soler, que a los seis minutos de juego puso por delante a los osonenses, que en su pista ya han logrado ganar al Liceo esta temporada. Poco más ocurrió en un primer tiempo sin espacio para el espectáculo. Ocurrieron pocas cosas y eso siempre interesó a los locales, que en un partido a cuerpo a cuerpo eran conscientes de su inferioridad. 

En el segundo acto, el Reus acentuó su insistencia para solventar el problema en el que se había metido. Marc Julià erró una falta directa después de una azul al local Benito, aunque Salvat, a los 37 minutos, logró igualar el partido. Y eso provocó un final absolutamente emocionante.

Aciertan los Rodríguez
Los hermanos Rodríguez se convirtieron en los grandes protagonistas de ese desenlace. Dani, por parte del Taradell, y Àlex, por parte del Reus. Los dos disputaron el enésimo enfrentamiento desde que ya no visten los mismos colores. Coincidieron en el Voltregà, club que les formó.

Dani volvió a poner por delante al Taradell cuando restaban seis minutos para el final del choque. Eso provocó euforia entre los aficionados osonenses, que rozaban otro triunfo de postín, ante uno de los grandes equipos del campeonato. 
Lo evitó Àlex Rodríguez, que salvó el Reus en una agonía con sabor agridulce para los rojinegros, que siguen teniendo problemas para ganar fuera.