El Reus suda para tumbar al colista

El Reus Deportiu, que al descanso ya ganaba por 4-1, sufrió para tumbar al colista destacado de este curso en la máxima categoría. Al final se tuvo que emplear a fondo en la segunda parte para amarrar la victoria frente al amago de reacción visitante, que llegó a empatar el duelo en los últimos minutos y a vender muy cara la victoria. La diferencia de nivel entre ambos equipos quedó plasmada desde los primeros minutos y, pese al voluntarismo de los visitantes, los de Jordi Garcia no quisieron sorpresas ni dejaron margen para los imprevistos.

Y eso que los asturianos pusieron el miedo en el cuerpo en varias ocasiones. Tras unos minutos de tanteo y aproximaciones, el equipo de Grado se avanzó en el 12’ por mediación de Pelayo. Pero los hombres del Baix Camp apretaron el acelerador para equilibrar pronto el duelo. Joan Salvat, en el 16’, niveló la contienda. Dos goles de Raül Marín y otro de Romà Bancells abrieron brecha en el luminoso para un Reus que parecía encarrilar la victoria, con ese 4-1 al descanso. 

Pero en la reanudación el Asturhockey dio el susto. Una salida eficiente de los visitantes les permitió recortar distancias con dos goles en dos minutos, obra de Pelayo y Curro. El Reus Deportiu pagaba cara su relajación y veía cómo su rival se había acercado peligrosamente. Y entonces llegó lo más temido, porque a cinco minutos del final, Fandos equilibró el encuentro para los asturianos. El farolillo rojo de la OK Liga, el equipo que sólo suma una victoria en su casillero, había neutralizado tres goles de desventaja hasta empatar en el feudo de todo un Reus (4-4). A partir de ahí el enfrentamiento entró en una fase vertiginosa, con un intercambio de golpes vibrante que podía decantar la balanza de cualquier lado. 

Marín y Pelayo prosiguieron en la firme intención de romper con el empate (5-5). El final del guión escondía emociones en sus entresijos. El templo vibró con un desenlace de thriller puro. Volvió a emerger la figura de la estrella rojinegra. Raül Marín, el hombre que suele despertar sonrisas, decantó la balanza con un gol en el último minuto (6-5). Su socio en ataque, Joan Salvat, culminó el rescate. Gol y sentencia (7-5). El Reus respiró aliviado.