El ebrense que triunfa en la Champions League femenina

Mariona Caldentey marcó el 2-0 en el minuto 93, sentenció la eliminatoria de cuartos contra el potente Rosengard sueco y Jordi Ventura (La Cava, 31 años) saltó de alegría en el banquillo. El ebrense, segundo entrenador del primer equipo del Barça femenino, había hecho historia. Por primera vez el equipo ‘culé’ se colaba en las semifinales de la Champions League, un hito que ha puesto al club en el primer plano futbolístico y mediático. «Nos hizo mucha ilusión. Somos conscientes de dónde hemos llegado y estamos muy ilusionados», recuerda ahora el técnico, a las puertas de disputar las semifinales.

En cuartos derrotaron al equipo liderado por Marta, la brasileña dueña de cinco Balones de Oro, algo así como la Messi del fútbol femenino. Jordi Ventura ha tenido una semana de trabajo frenética, enloquecida, para preparar junto al primer entrenador, Xavi Llorens, y al resto del staff, un duelo trascendental. «Ganar la competición ya son palabras muy mayores. Llegar aquí ya ha sido un sueño hecho realidad. Queremos disfrutar de esto», narra Jordi, vital en esa puesta a punto.

Él se encarga de preparar los vídeos para el análisis pormenorizado del rival. El apoyo audiovisual es imprescindible en la elite para procurar un rendimiento máximo y minimizar las virtudes del rival. También se encarga de las jugadas de estrategia ofensivas y de toda la gestión de ejercicios analíticos y técnicos, mientras que Llorens, el primer entrenador, asume labores más tácticas.

Ventura alerta del potencial del adversario: «Tenemos la referencia del año pasado, cuando ya nos enfrentamos a ellas. Han mejorado mucho el equipo con las nuevas incorporaciones. Han dado un salto cualitativo importante. Delante y en el centro del campo tienen jugadoras muy buenas y un potencial grandioso».

Jordi se ha ido especializando en el fútbol femenino. Comenzó entrenando en la tecnificación del Barça y luego pasó a la FCB Escola. Empezó desde las categorías inferiores, llevando a equipos de la base hasta que hace dos temporadas dio el salto al primer equipo. «Antes nadie me había hablado del fútbol femenino, pero el Barça me llamó y no dudé. Es algo muy gratificante. No tengo en la cabeza pasar al masculino. Nunca se sabe, pero de momento quiero seguir aquí».

Ventura ve diferencias y detalla algunas particularidades del fútbol femenino: «Ellas preguntan mucho, en el sentido de querer mejorar. Aún hay que trabajar mucho. Este fútbol está creciendo y se hará mucho más grande».

Cada éxito del Barça femenino se ve también como un progreso del fútbol de mujeres, casi una reivindicación. «El mundo es de ellas. Es importante que el club siga apostando por esto. Hace cinco años no se conocían a las jugadoras. Ahora vas a los campos y sí se saben los nombres. Algo está cambiando», zanja Ventura.