El escenario deseado

Ni siquiera los vaivenes de una temporada larga y terriblemente exigente han apartado al Reus de su desafío. Natxo González siempre mantuvo que el objetivo pasa por aguantar en la pelea hasta el suspiro final. Parece que lo ha conseguido. Restan tres partidos para el final de curso. Tres exámenes que dictarán sentencia. Tres compromisos cardíacos, donde el margen de error resulta mínimo. Al Reus le vale con ganar los tres para meterse entre los cuatro elegidos. Depende de sí mismo.

La derrota del Lleida en Villarreal todavía ha abierto más puertas. Y cuidado, los ilerdenses vuelven a jugar fuera esta semana. Deben visitar el incómodo estadio del Olot, un rival que todavía no ha definido la permanencia. Mientras, los rojinegros reciben este domingo al Alcoyano, rival directo en la lucha. Los alicantinos suman 53 puntos, cuatro menos que el Reus y cinco menos que el Lleida, cuarto clasificado. En el Estadi prácticamente se van a jugar su suerte. Ese cara o cruz se convertirá en la previa de otro duelo de alerta máxima. En la penúltima jornada del campeonato, el Reus visitará el Camp d’Esports de Lleida, donde seguramente saltarán chispas. Por último, los rojinegros recibirán, en la última jornada, al Olot, un equipo que seguramente ya no contará con ningún aliciente en cuanto a términos numéricos. Mientras, el Lleida acabará el campeonato en Cornellà, otro rival que está pujando por evitar el descenso directo y que necesita los puntos.

Por su parte, los tres partidos que le restan al Hércules, tercer clasificado y todavía implicado con Reus y Lleida, son en Sant Adrià, ante el Espanyol B, este fin de semana, en casa ante el Zaragoza B y finalizará el campeonato en Mallorca, ante el filial balear.El Hércules aventaja en un punto al Lleida y en dos al Reus.

De este modo, las ventajas mínimas entre los aspirantes a dos de las cuatro plazas de play off hacen que el final de la temporada se convierta en un mar de emociones incontrolables.

Bajas importantes

Por otra parte, el Reus ya piensa en su decisivo partido del domingo ante el Alcoyano. Deberá afrontar dos bajas sensibles por acumulación de cartulinas amarillas. Ismael Moyano y Ramon Folch vieron la quinta en Valencia y verán la cita desde la grada del Estadi municipal junto al resto de aficionados.