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Los moción de censura contra la Junta Directiva del FC Barcelona encabezada por el presidente Josep Maria Bartomeu logró ayer las 16.521 firmas fijadas para poner en marcha un referéndum sobre la continuidad del mandatario al frente del club azulgrana. «Es un éxito de la democracia. Una demostración de que el socio culé no quiere que esta junta siga más al frente de la entidad», exclamaba Antimo de Salve, mano derecha en Tarragona de Jordi Farré, uno de los impulsores de la moción.
El médico italiano, fundador en 2007 de la Penya Lombarda (Italia) y residente desde hace un par de años en Tarragona, se movilizó desde el primer día para la moción de censura. Conocía a Jordi Farré del Camp Nou. Eran vecinos de localidad. Uno de esos vínculos inexplicables de quienes cada 15 días comparten una pasión. Nada más enterarse de las intenciones del empresario catalán se puso a su disposición para colaborar en la medida de lo posible desde Tarragona. Desde acercar medio millar de papeletas para la Penya Casal Barcelonista Tarragona hasta viajar por toda la comarca y cercanías recogiendo firmas que acercaba a Barcelona. No le importaban los kilómetros. Solo conseguir que los socios tarraconenses que quisieran apuntarse a la moción pudieran hacerlo. Además fue uno de los anfitriones de la cena que Jordi Farré celebró en el Restaurante SolRic. Todo un esfuerzo que ha tenido su recompensa con la recogida de 20.687 firmas, de las que se habían tramitado ya un total de 19.745, con 18.090 válidas. Más del 15% necesario que marcan los estatutos del club. «La respuesta ha sido brutal. Nunca antes se habían recogido tantas firmas. Hacerlo además sin partidos y en plena pandemia de Covid-19 es impresionante», detalla.
Este jueves finalizará el procedimiento de validación y la junta directiva, que tiene prevista una reunión ordinaria la próxima semana, deberá convocar un referéndum que se llevará a cabo en un plazo no inferior a diez días ni superior a veinte a partir de ese momento. Siempre y cuando la Genetalitat de Catalunya determine que el referéndum es viable a consecuencia de la pandemia del coronavirus. La Junta hizo la consulta al Procicat y aún espera respuesta. Si da luz verde al proceso, Josep Maria Bartomeu y sus directivos deberían abandonar el club en el caso de que los votos a favor de su marcha superasen el 66%.
Antimo De Salve espera no llegar al punto de tener que celebrar la votación y cree que Bartomeu debería dimitir antes. «No sé lo que harán ellos, pero yo me marcharía ya». Según el socio azulgrana, el club tiene una crisis con tres caras: institucional, deportiva y económica. Recuerda que la Junta ha pasado de 20 a 14 miembros por distintas desaveniencias y que el ‘Barçagate’ no solo no se ha cerrado sino que avanza en los tribunales. A ello se le suma la pésima situación financiera de la entidad que ha llevado al club a recortar el sueldo de sus empleados. «Que ahorre el dinero que costará el referéndum. Si de verdad es barcelonista, que actúe por el bien del club y dimita antes de perder la cara en una votación que saldrá cara económicamente. Solo por estar cinco meses más, ya que el 15 de marzo serán las elecciones y no se puede volver a presentar», sentencia.
De esta manera, dice Antimo De Salve, permitirá que la junta entrante puede tener el mercado de invierno no malvender más a jugadores. El italiano confía que esa nueva directiva esté encabezada por Jordi Farré, cuya candidatura contará con el italiano residente en Tarragona.
