El técnico Nogués 'se queda' en Argelia

Entrenar en España cada vez es más difícil. Hay muchos técnicos y pocos banquillos, por no hablar de las dificultades económicas que sufren en muchos equipos. La falta de expectativas hace que sean muchos los preparadores que deciden hacer las maletas y probar ligas nuevas. Es el caso del exentrenador del Nàstic Josep María Nogués que fijó su destino en Argelia. 

«El estar parado te lleva a plantearte salir fuera. El Paradou nos presentó un proyecto de cantera, para trabajar con jugadores con futuro. Me gustó la idea», explica Nogués. El conjunto argelino buscaba un entrenador que implantara un fútbol combinativo y ofensivo. Un estilo inexistente en la liga norteafricana más física y de un juego directo. Junto con otro exgrana como Adolfo Baines (segundo entrenador) y los preparadores físicos Pablo Gómez (en la primera temporada) y Lluís Milá (en el segundo año), el equipo logró esa mejora en el aspecto técnico. 

«La plantilla aceptó bien el juego de posesión y participación que le propuse y eso fue esencial para que saliera bien», afirma el técnico catalán. No faltaron los equipos que trataron de imitar la propuesta futbolística del Paradou de Nogués, aunque sin mucho éxito. «Para poder practicar un tipo de juego asociativo necesitas a los jugadores indicados y en eso consiste la academia, en formarlos. El 80% del equipo eran canteranos». 

En tan solo dos años a los mandos del Paradou, Nogués consiguió ascender a la Ligue 1, la primera división del país, con un récord de puntos.  No contento con ello, en el segundo año mantuvo al equipo cómodamente obteniendo la séptima plaza. Todo ello con un estilo sibarita que el técnico ha defendido desde siempre, inspirado en el mejor Barça.

Pero Nogués decidió poner punto y final a su relación con el equipo del barrio argelino de Hydra. Entre los motivos de su renuncia, la ausencia de afición local. Los únicos hinchas que se acercaban al Stadio Hydra eran seguidores de otros equipos cercanos que se sentían atraídos por el buen juego que practicaban los jóvenes del Paradou. 

En un país en el que la grada ejerce una importante influencia a base de bengalas y mucho ruido, al más puro estilo de las ligas de Grecia y Turquía, jugar sin hinchada propia resulta un hándicap.
Tras dos años de contrato, Nogués decidió no renovar con el club argelino. «Dejar el equipo en un buen momento evita quemarse», explica. 

Se va satisfecho del trabajo realizado en la cantera. «Hemos hecho cuatro jugadores internacionales absolutos y a otros cuatro me los llevaría con los ojos vendados a cualquier equipo que entrenase».  Muchos de los futbolistas de la academia del Paradou tienen el sueño de jugar en las competitivas ligas europeas y que gracias a una mejora técnica por parte de Nogués, dos de ellos ficharon por equipos europeos. «No puedes pararlo, ya que para ellos es una mejora tanto en el aspecto económico como el deportivo».

Futuro a 200 km de su exequipo

Esta nueva temporada el técnico  ha encontrado su nuevo hogar en Bordj Bou-Arréridj ciudad y capital de provincia homónima situada a unos 200km de distancia de la capital del país, Argel, donde jugaba su anterior equipo.

Su nuevo equipo, es el recién ascendido CA Bordj Bou-Arréidj, el club más improtante de la provincia, con un estadio de 20.000 espectadores. El ‘CABBA’ vuelve a la Ligue 1 tras años en la sombra y Nogués buscará mantener la categoría con su compañero del Paradou, el preparador físico Lluís Milá. En cambio, el que fue su segundo entrenador en el Paradou, el exgrana Adolfo Baines, no continuará para poder estar más cerca de su familia.

20 años siendo «tarragoní»

Nacido en Barcelona y formado en La Masia del FC Barcelona, Nogués confiesa que Tarragona, la ciudad en la que lleva veinte años viviendo, es como su segunda ciudad y se siente un «tarragoní més». A eso se le suma el amor al equipo de fútbol de la ciudad en el que estuvo en dos etapas distintas: el Nástic. «En Tarragona he encontrado paz y serenidad, si a eso le unes el Nástic, en el que estado en dos etapas distintas, pues le coges un cariño especial». Josep María Nogués tiene Tarragona y el Nástic en el corazón.