El vuelo sin límites de Meritxell Benito

La ulldeconense, actual subcampeona de Europa juvenil, empezó a saltar en el jardín de casa con una caña de bambú. Su progresión no tiene techo

29 mayo 2017 18:09 | Actualizado a 20 junio 2017 15:36
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Todo empezó cinco años atrás. El escenario, el jardín de la casa familiar, ubicada en las afueras de Ulldecona. Había espacio suficiente para improvisar un zona de saltos, así que Josep no se lo pensó dos veces. Unos metros de césped ejercerían como tartán; una caña americana (de bambú silvestre) supliría la pértiga; y paja recubierta con lona bastaría para la zona de caída. Materia prima que le ayudó a tirar del ingenio. De lo que no tenía ninguna duda era de la agilidad y valentía de aquella niña de 13 años para quien había diseñado todo aquel montaje: correría unos metros con la caña en los brazos, la clavaría en el suelo para a continuación flexionarla, se impulsaria para elevar su cuerpo, superaría limpiamente el listón y caería. Elevándolo centímetro a centímetro a cada intento. Aquella muchacha no era otra que su hija, Meritxell Benito, la actual plusmarquista española juvenil de pértiga con una marca de 4 metros y 13 centímetros.

Esos fueron los curiosos inicios atléticos de la niña que antes se había fogueado en el judo (llegó a ser subcampeona de Tarragona alevín con 10 años y figuraba entre las cuatro mejores de Catalunya). El atletismo ya fluía por sus venas después del pasado de Josep,  quien en sus años mozos había practicado cross y los 3.000 y posteriormente llegó a fundar y regentar el gimnasio Dinamics.

Josep, que siempre ha sido el entrenador de Meritxell, acertó de lleno a la hora de encaminarla hacia la pértiga. Desde que empezó a practicarla como federada la avalan, entre otros títulos, el de España cadete (con récord nacional de la categoría con 3,75 metros); el de España juvenil (4,13 m.) y el júnior en pista cubierta (el último que ha conseguido, con 4,11 m.). Incluso cuenta con una medalla de bronce en el último Campeonato de España absoluto que consiguió en 2016, siendo aún juvenil.

La pasada temporada fue la mejor de Meritxell, después de que se proclamara además subcampeona de Europa juvenil en Tiflis (Georgia).
La ulldeconense entrena de dos a tres horas diarias (cinco días a la semana), sesiones que combina entre Ulldecona, Amposta, Vinarós y Benicarló. Ahora mismo defiende la camiseta del club Playas de Castellón, aunque con anterioridad formó parte de la Unió Atlètica Montsià, el Club Atletisme Terres de l’Ebre y el Baix Maestrat

La constancia, su espíritu de superación y algunos secretos como el taichí y la meditación aplicada al atletismo son las claves de sus éxitos. «Esta especialidad es tan compleja que la mayoría lo acaba dejando cuando se ven bloqueados una vez no consiguen seguir mejorando sus marca», asegura Josep.

La progresión de Meritxell va por ahora viento en popa, hasta el punto que sus vuelos no parecen tener límites (en los entrenamientos ha llegado a saltar mucho más que en las competiciones oficiales). Su gran objetivo de la temporada será el Campeonato de Europa de júnior que tendrá lugar en Grossseto (Italia) este verano, aunque a medio plazo podría a llegar a atacar el récord de España -4,56 metros, en poder de la ya retirada Naroa Agirre- y por qué, la clasificación olímpica para los Juegos Olímpicos de Tokyo’2020 (en Río’2016 la mínima exigida fue de 4,50 metros).

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