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Elia Canales es la niña precoz del tiro con arco español. A sus 17 años, ha logrado un subcampeonato en los Juegos Olímpicos de la Juventud, una medalla de oro en la Copa del Mundo de Turquía 2019 y posee el récord de España tanto Absoluto como Júnior. Desde este martes competirá la próxima semana en el Campeonato del Mundo de ‘s-Hertogenbosch (Holanda) por un billete para los próximos Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Llevas unos días de concentración en ‘s-Hertogenbosch (Holanda) preparando el Mundial. ¿Con qué objetivo lo encaras?
El de conseguir plaza para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 en la modalidad de equipos femeninos. Así podemos ir más arqueros a las olimpiadas. Para ello debemos quedar entre los ocho primeros del clasificatorio. Creo que hay buen equipo. En la Copa del Mundo hemos quedado dos veces cuartas y una quinta, por lo que hay opciones.
¿Y a nivel individual?
Es bastante difícil conseguir la plaza individual para los Juegos Olímpicos. Pero mi reto siempre es llegar a lo más alto. Si puedo llegar al podio, mejor.
Para un atleta los Juegos Olímpicos son el evento más importante. ¿Competir por una plaza en las próximas Olimpiadas añade presión?
Presión siempre tienes. Si no es por una medalla es por clasificarte entre los diez primeros o una plaza en algún otro campeonato. Y es bueno que haya presión. Te activa.
Llegas después de colgarte el oro en la modalidad de equipos mixtos en la Copa del Mundo junto con Miguel Alvariño.
En Shanghai (China) nos eliminaron en cuartos de final y este año en Turquía, Antalya, queríamos mejorar ese resultado. Tuvimos que entrenar mucho para poder superarnos y conseguir la medalla de oro.
Además de ese oro, sumas una plata en los Juegos Olímpicos de la Juventud y récords de España Absoluto y Júnior. ¡Y tienes solo 17 años!
Me falta poco para los 18 (risas). Nunca pensé que pudiera ir todo tan rápido. Por ejemplo, hice las pruebas de clasificación para el Campeonato del Mundo para ganar en experiencia y me acabé clasificando. Soy una persona que no me pongo límites. Creo que si te los pones te impones una barrera. Uno siempre tiene que pensar en llegar a lo más alto posible.
¿Lo tuyo con el tiro con arco fue un ‘flechazo’ imprevisto?
Con 13 años me fui a un campamento de verano durante 15 días. El primer día hicimos las clásicas actividades para conocernos. En uno de los juegos empecé a correr, me caí y me rompí el tobillo. Quedaban 14 días por delante y lo único que podía hacer era tiro con arco. Me gustó y cuando volví a casa le dije a mi padre que quería apuntarme a tiro con arco. Hasta él se apuntó conmigo.
¿Cómo le ha ido a él?
Más o menos (risas). Ahora soy yo la que le entreno.
¿Lo ves para competir?
Ha mejorado pero todavía no está al nivel...
¿Te diste cuenta de que tenías un don especial con el arco?
Noté que hacía algo que me gustaba y me divertía. Por eso quería seguir mejorando. Creo que si haces algo que no te gusta, como por ejemplo cuando era más pequeña y hacía natación, no me gustaba me salía fatal. Siempre era la última.
¿Puede ser bueno de manera innata, pero detrás de todo éxito siempre hay un sacrificio?
Hay muchas horas de entrenamiento. Días en los que no te apetece y preferirías salir con tus amigas. Pero todo tiene su recompensa.
A tu edad no debe ser fácil ese sacrificio. ¿Cómo lo llevas?
Si te organizas bien puedes hacerlo todo. Claro que no salgo tanto como me gustaría, pero cuando lo hago intento disfrutarlo.
¿Qué te espera después del Campeonato del Mundo?
El Campeonato de España Absoluto y Júnior y el Mundial Júnior, que se disputa en Madrid (19 al 25 de agosto). Porque sigo siendo Junior y me gustaría poder ganar el título de la categoría.
