Empate con borrachera de goles

Reus y Liceo empataron a seis en un partido rutilante en la que el juego ofensivo brilló descaradamente. 

El Reus Deportiu se empeñó en seguir destrozando al Liceo, como si el partido de la Liga Europea todavía no hubiese acabado. Albert Casanovas castigó en uno de los primeros suspiros de la tarde para poner por delante a los rojinegros. Sin embargo, los visitantes reaccionaron con entereza, dejando claro que el partido del pasado sábado era historia. Di Benedetto empató en el minuto 3. Poco les duró la alegría ya que el killer Raúl Marín colocó otra vez por delante al Reus en el minuto 4. 

El comienzo del partido dejó claro que aquel choque iba a ser una aventura exigente, alegre y sobre todo, vistosa para el espectador. Josep Lamas volvió a colocar las tablas en el marcador en el minuto 10. 

Entonces, apareció Marc Torra para unirse a la fiesta y volver a adelantar a los rojinegros en el marcador, colocando el 3 a 2. El intercambio de golpes seguía en plena efervescencia. Carballeira lo hizo evidente, empatando a tres cuando todavía no había pasado ni un minuto del gol rojinegro. 

En el minuto 30, Raúl Marín volvió a hacer acto de presencia para imponer su ley, la del gol, esa que le pertenece y de la que hace gala. Casanovas amplió la ventaja a dos goles, dejando entrever que el partido se podría inclinar de lado rojinegro. 
Sin embargo, Di Benedetto volvió a añadir emoción al partido con un gol de falta directa en el 37’. Carballeira certificó que no había nada decidido cuando marcó el 5 a 5.

Marc Torra se rebeló de nuevo y volvió a colocar al Reus por delante en el marcador. Aquello estaba siendo un destape constante.  Di Benedetto logró el empate en la agonía con una falta directa que transformó. Reparto de puntos entre dos colosos.