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No son demasiados los alicientes que tiene el Nàstic por delante en lo que queda de temporada. El descenso ya está consumado y solo está la honra en juego, que no es poco. El partido ante el Mallorca, en el que los granas vencieron por 2-1, fue el claro ejemplo de lo que tiene que hacer el equipo en los cuatro choques restantes. Abandonar la categoría con dignidad sería un bonito detalle para una afición que nunca ha dejado de creer y ha apoyado hasta el último aliento. Van por el camino.
Con este panorama, el conjunto tarraconense se ha marcado dos retos por delante con la intención de encontrar motivación para afrontar con plenitud el final de campaña.
No es fácil competir cuando sabes que no has cumplido el principal objetivo marcado. A nivel psicológico es una losa pesada que puede llegar a afectar de manera negativa en el rendimiento. No obstante, también puede servir de liberación, cómo pareció ocurrir frente al Mallorca. Son muchos los equipos que una vez descendidos comienzan a sumar puntos con los que nadie contaba. El fútbol tiene un componente mental que últimamente por fin parece tenerse muy en cuenta.
El primer reto que tiene por delante la entidad tarraconense es el de no ser el peor equipo de la categoría. El CF Reus será colista pase lo que pase, puesto que fue descalificado al final de la primera vuelta, pero quien quede por encima del conjunto rojinegro se le podrá considerar el colista de Segunda División a nivel deportivo. Por esa plaza, parece que Córdoba y Nàstic van a pelear hasta el final.
Lo cierto es que el conjunto de Enrique Martín dio un paso adelante en el objetivo de no ser el colista deportivo de Segunda con la victoria ante el Mallorca y la derrota del Córdoba frente a Las Palmas. En estos momentos, los granas se encuentran solo un punto por encima de los cordobeses.
Esta próxima jornada los dos equipos, ya descendidos, se medirán en el Nuevo Arcángel. Se le puede denominar como la final de la honra. Una victoria del Nàstic colocaría a los blanquiverdes a cuatro puntos de distancia, dejando prácticamente descartada las opciones de ser el colista de Segunda División en la temporada 2018/2019.
La victoria ante el Mallorca no solo fue importante para dejar de ser el peor equipo de la categoría a día de hoy, también sirvió para que los tarraconenses alcanzaran el puntaje de 31 puntos. Siendo realistas se trata de una cifra desastrosa pero que anda cerca de no dejar a los granas como uno de los peores equipos de la categoría que se recuerdan al menos en cuanto a los tangibles.
Sin ir más lejos, el peor Nàstic de la historia en Segunda División con el formato actual de 22 equipos logró 31 puntos en total. Fue en la temporada 2011/2012. Por lo tanto, los granas tienen hasta cuatro jornadas por delante para superar este registro. Es decir, sumando un punto de los doce que hay en juego les basta.
Los peores colistas de 2ª
Los tres puntos conseguidos frente al cuadro balear, les permitirá también a los tarraconenses no ser el peor colista reciente en Segunda División, pase lo que pase, si es que acaban siendo el último clasificado sin tener en cuenta al CF Reus. Ese ‘título’ lo ostenta el Xerez con los 30 puntos que cosechó en la temporada 2012-2013, el registro más bajo en el último lustro.
Más negativa todavía fue la temporada del Sevilla Atlético en el curso 2008-2009, en la que solo sumó 19 puntos, una cifra tan negativa que se intuye difícil que algún día pueda ser superada.
Después hay varios colistas que se han movido entre los tangibles de 32, 33 y 34 puntos, por lo que el Nàstic tiene la oportunidad de no aparecer ni siquiera entre uno de los peores conjuntos de la categoría de plata. Un pequeño consuelo para una temporada para el olvido.
