Eugeni Gavaldà, el ‘chico de oro’ ampostino

El ampostino Eugeni Gavaldà Elias (22 años), componente de la Sala Esgrima Amposta, ha firmado una buena temporada en la que logró la primera posición en el Campeonato de España absoluto de esgrima (espada) tanto en la competición individual como en la de equipos.

El joven explica que «valoro muy positivamente la campaña que he realizado ya que logré todo lo que estaba en mi mano. El hecho de conseguir estos dos oros demuestra que estoy en el camino correcto». Además, el tirador de la capital del Montsià pudo entrar en el cuadro final de los 64 mejores del mundo en el Grand Prix de Budapest. 

Eugeni se prepara desde hace cuatro años en Madrid con el seleccionador nacional de esgrima Ángel Fernández, pero afirma que «mi entrenador de club al que siempre me gusta nombrar es Marc Font». 

Eugeni trabaja a destajo para firmar los mayores éxitos posibles y sobre las posibilidades de estar en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 explica que «la esgrima es una disciplina deportiva en la que hay muchas sorpresas, pero sobre el papel quizás es un poco pronto para mí. A pesar de todo, es verdad que en el deporte nunca nada es seguro y menos todavía dentro del nuestro». Para poder cumplir lo que sería realmente un sueño, apunta que hay diferentes vías: «conseguir estar entre los 16 mejores del ranking mundial, o bien por equipos, o bien ganando el preolímpico. Quizás las dos últimas sean más asequibles». 

Para que todo salga como espera, el ebrense sigue unas sesiones preparatorias intensas que combina con la presencia en las diferentes competiciones del calendario.

A lo largo de todo este tiempo practicando su especialidad deportiva favorita, Eugeni comenta que «evidentemente que viajar por el mundo lo que provoca es conocer países, culturas y personas que al final se acaban convirtiendo en buenos amigos». 

El ampostino es un apasionado de la esgrima hasta el punto que afirma que «me aporta poder seguir caminando. Para mí es como un pie y los estudios serían el otro. Creo que a estas alturas ya no podría hacer una cosa sin la otra». El tirador de las Terres de l’Ebre está cursando una Ingeniería de Telecomunicaciones y apunta que «previamente, cuando llegué a Madrid después de haber hecho el bachillerato en Amposta, me saqué un grado superior de Telecomunicaciones. 

Lejos de casa
Eugeni se encuentra a muchos kilómetros de su Amposta natal, pero sigue manteniendo vivo el vínculo con su tierra y con sus familiares: «ya tenemos todos asumido que en casa me verán poco el pelo. Puedo ir allí una vez al mes y muchas veces ni eso. De esta manera, lo que me queda para tener contacto con ellos es el teléfono». 

El componente de la entidad ampostina no se olvida de sus seres queridos y también tiene tiempo para practicar sus aficiones entre las que se encuentran «todo lo que esté relacionado con el deporte. Además, en verano lo que más me gusta es ir a la playa con los amigos, comer con ellos...y alejarme de los aeropuertos».