Ferran López: 'El momento es ahora'

Ferran López cumple su temporada número 15 como entrenador de OK Liga y lo hace con un regreso sonado a Calafell. En realidad, el retorno se ha producido solo un año después de su salida al Noia, una aventura corta y con cierto final polémico. El club verdiblanco le ha rescatado para que lidere, probablemente, la propuesta más ambiciosa de la historia del club, con nueva inversión económica, fichajes de renombre y metas renovadas.

Por ambición, nadie puede superar a López, un tipo optimista y enérgico, rebosa hockey por los cuatro costados. «Cuando el club me volvió a contactar, sólo les pedí un cambio, dar un paso hacia adelante, y por suerte se ha cumplido. Somos humildes pero valientes», reconoce.

Su nuevo Calafell acumula 10 días de pretemporada y ya le ha dado tiempo de ganar el primer partido de Lliga Catalana, este sábado en Caldes, uno de los rivales con mayor potencial del campeonato, tercero la pasada temporada. «Estamos contentos, pero solo es un partido. Tenemos que mejorar y hay tranquilidad en el día a día», confirma.

Ferran López es consciente de que el crecimiento debe darse en todos los sentidos, «no sólo debe crecer el equipo, el club a nivel general debe hacerlo, la ciudad y se relación con el hockey, la afición, también. Tenemos muchos ingredientes que hacen que nos ilusionemos. Hay momentos que se tienen que aprovechar y para el Calafell el momento es ahora». También relata una realidad incontestable; con la nueva plantilla nadie se puede conformar con la permanencia. «Hay que dar un paso hacia adelante, pero somos también realistas y sabemos que la competencia en el campeonato es grande».

En el mismo barco que Ferran López, han llegado al Joan Ortoll Sergio Miras (Caldes), Jordi Ferrer (Noia), Jan Escala (Vendrell), Humberto Mendes (Girona) y Aleix Ordóñez (Barça B). Se mantienen en el grupo, los cedidos por el Barça Xano Edo y Martí Gabarró y los renovados Arnau Xaus y Uri Palau. Un plantel repleto de recursos y con una mezcla interesante de juventud y experiencia. «Dispongo de todos los registros con esta plantilla, estoy muy satisfecho. Pienso que el que quiera jugar va a tener que trabajar mucho, porque los jóvenes apretan fuerte», aclara el entrenador.

Su regreso a Calafell no lo ve como un paso atrás. «He vuelto a un lugar donde fui muy feliz y creo que eso nunca puede considerarse un retroceso en mi carrera. Y lo hago convencido».

La salida del Noia

La marcha de Ferran López del Noia, su anterior club, resultó toda una sorpresa para el mundillo del hockey, sobre todo porque llevaba pocos meses al mando del equipo. En enero la directiva decidió comunicarle que no iba a contar con él para el futuro. «Por cómo fue, creo que dos dirigentes, Monserrat y Andreu, me faltaron al respeto, tanto a nivel personal como deportivo. Soy del Noia y me gustaría volver en un futuro, pero no lo haré si esas dos personas siguen en la entidad. No tuve ningún problema con los jugadores», advierte.

El shock de la notificación no afectó demasiado al técnico, que terminó el curso con mucha dignidad y aceptó el regreso al Joan Ortoll con toda la energía posible. Para Calafell, el nuevo reto resulta del todo atractivo, también para el cuerpo técnico y el grupo de jugadores que conforman la escuadra. En Caldes ya demostraron pinceladas de lo que pueden dar y la predisposición para armar un juego competitivo es del cien por cien. La vista ya anda puesta el mes de septiembre, cuando arranque lo oficial. De momento, la Lliga Catalana sirve para engrasar la maquinaria y perfeccionar el plan.