Gerard Oliva: 'Me siento en deuda con Toni Seligrat'

El delantero de Riudecanyes completó una de sus mejores actuaciones de la temporada frente al Espanyol B

26 marzo 2021 06:30 | Actualizado a 26 marzo 2021 12:52
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Gerard Oliva es consciente de que su temporada a nivel goleador no está siendo la esperada ni por la afición ni por él mismo. Tres goles es una cifra insuficiente pero trabaja con constancia para cambiar esta dinámica. Ante el Espanyol B, en el regreso del público al Nou Estadi, completó uno de sus mejores partidos de esta temporada y sentó las bases de un renacer que quiere completar en las próximas semanas. Cuenta con la confianza del vestuario y del cuerpo técnico para ello. No obstante, el de Riudecanyes ya avisa: «El mejor Gerard Oliva está por llegar».

¿Echaba de menos al público en el Nou Estadi?

Claro, el público es un aliciente y el motor del equipo. Fue un factor importante y motivacional.

Además, lo hizo luciendo el brazalete de capitán. ¿Qué le supone?

Es un orgullo y un honor para alguien como yo que soy de la casa. Tener la oportunidad de ser capitán es una motivación extra para ser un líder dentro del campo y ayudar a tus compañeros.

Eso le iba a comentar, que más allá del brazalete, se le ve líder dentro del campo.

Dentro del equipo hay jugadores que hablan más y con más personalidad y yo soy uno de los que tiene que transmitir y de los que tiene que tirar de los jóvenes para que todos estén metidos. El míster necesita gente dentro del campo que grite y ordene.

¿Cree que ante el Espanyol B se vio al Gerard Oliva que la gente quiere?

Creo que fue uno de los mejores partidos y el único, pero fue no meter gol. Algunos compañeros me dijeron que era un partido de 10 con gol, pero la verdad que me sentí muy bien.

¿Le ha pasado factura meterse tanta presión a nivel individual como dejó entrever el míster el otro día?

Quizás me he metido demasiada presión por el tipo de año que era. Había que quedar entre los tres primeros para hacer la Segunda B Pro que ya hemos visto que otros equipos históricos no lo han conseguido. Esto era un factor extra, pero hay que saber esta presión y creo que ha habido momentos en la que me ha podido y esto ha hecho que no se vea mi máximo rendimiento.

¿Le han afectado las críticas?

Si te digo la verdad el mundo del fútbol para el delantero es muy simple: si metes goles eres muy bueno, si no metes te van a criticar. Entiendo que me puedan criticar por el tema del gol, yo soy el primero que quiere meter goles y es anormal que lleve tantos partidos sin marcar. Las cosas te vienen como te vienen y lo que tienes que saber es llevar esta presión para que no te haga perder la confianza.

Son tres goles, pero queda todavía temporada por delante. La segunda fase puede ser un borrón y cuenta nueva.

Si piensas en los goles que llevas en los partidos que has jugado te puede entrar un poco de ansiedad y desánimo, pero el fútbol cambia muy rápido sobre todo para los delanteros. En un partido metes dos goles y todo parece diferente. Estoy sentido en este sentido, tengo confianza en mí mismo y estoy seguro de que van a llegar.

¿Y más allá del gol quiere verse como contra el Espanyol B?

El equipo se beneficia mucho de mi colectivamente y yo hasta ahora no me he beneficiado lo suficiente del equipo porque no he merecido la recompensa personal por la que trabajo. Yo entiendo que el aficionado mira si el delantero ha marcado o no, pero la gente de dentro del fútbol no es solo gol porque si fuese así me quedaría dentro del área esperando hasta que me cayera alguna. Hay muchas facetas y si todas los haces bien cuando te llegue la ocasión la vas a meter.

¿Siente la confianza de Seligrat?

Sí, el míster confía en mí porque me lo demuestra y yo creo que con un partido como el otro día es una manera de devolverle la confianza y que vea que el mejor Gerard Oliva está por llegar. Estoy un poco en deuda con él, pero espero que en esta segunda fase se vea mi mejor versión porque va a ser un plus para el equipo.

¿Es de los mejores vestuarios en los que ha estado?

No sé si el mejor, pero uno de los mejores. Es un vestuario de buenas personas y buenos jugadores que normalmente cuando es un vestuario de buenos jugadores hay muchos egos y no hay el clima que hay aquí. He estado en Huesca, Murcia… y este vestuario es especial por eso este año a priori por todo lo que venimos haciendo creo que este es el año porque se ve y porque se palpa. El equipo transmite y la afición se identifica con él como se pudo ver el otro día.

¿Cómo ve la segunda fase?

No creo que sea más difícil que la primera. Estamos en un subgrupo muy complicado y el nivel de los partidos va a ser parecido a los de la primera fase. Lo bueno de haber tenido un subgrupo tan complicado es que no te van a venir equipos muchos mejores. Yo estoy convencido por ejemplo que el Espanyol B lo metes en el otro subgrupo y te queda arriba.

¿Le da miedo algún equipo?

No porque veo a mi equipo y yo viendo a los jugadores que tenemos y lo trabajados que estamos… puede haber equipos como nosotros, pero mejores no lo creo ni individualmente ni colectivamente.

¿Ha hablado con algún excompañero que le haya dicho algo sobre el Nàstic?

Hablo con Fran Grima del Ibiza y me dice que vamos como aviones. Me dice que cuando vayamos allí nos van a meter un poco de pique, pero yo creo que nos hemos ganado el respeto de la gente por lo que estamos haciendo cada domingo y eso el año pasado no ocurría porque no teníamos el respeto de nadie.

Si se llega al play off el Nàstic, ¿es el prototipo de equipo perfecto para jugarlo?

Yo te digo que seguramente seremos el rival que menos querría la gente porque somos muy competitivos, estamos muy juntos, nos ayudamos mucho defensivamente y ofensivamente se meten goles. Si yo no jugase en este equipo, no lo desearía.

Por último, Trilles me prometió un tatuaje si ascendía el equipo, Bonilla que sacaría el tractor, Pedro me contó que haría algo histórico… ¿Qué promete Oliva?

Yo me tiro desde el Balcón del Mediterrani con paracaídas si quieren (ríe). No he pensado en nada pero soy capaz.

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