Goldar, regreso al pasado

El futbolista de Portas está rindiendo a buen nivel como mediocentro defensivo, un puesto que ocupó hasta el juvenil A en la cantera del Celta

09 octubre 2019 09:10 | Actualizado a 11 octubre 2019 16:06
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David Goldar dio el salto al Celta B en la temporada 2013/2014 después de su último año como juvenil. Lo hizo en un filial que competía aquella temporada en el grupo 1 de la Segunda División B. En aquel plantel convivieron jugadores que a día de hoy se manejan con soltura por la élite del fútbol español. Rubén Blanco, Kevin Vázquez, David Costas, Santi Mina y Borja Iglesias, entre otros, fueron compañeros del jugador de Portas.

Goldar aterrizó en el filial celeste con la etiqueta de zaguero. Una posición que había desempeñado por primera vez con continuidad en su último año como juvenil. Su rol en las categorías inferiores del Celta siempre había sido más de mediocentro de contención. En el juvenil A del conjunto celeste destacó junto a David Costas, formando una pareja de centrales de alto nivel.

Existió debate en Vigo sobre si Goldar era un jugador más apto para el puesto de mediocentro defensivo o de central. A día de hoy, todavía se puede leer en un foro celeste como varios aficionados celtistas debatían sobre el futuro del hoy jugador grana. Muchos le veían como central y otros como mediocentro. Uno incluso le llegaba a comparar con Javier Mascherano, futbolista argentino que pasó por el Barça y que comenzó su carrera como pivote y acabó de central.

En el Camp d’Esports de Lleida, Xavi Bartolo reavivó involuntariamente un debate que ya parecía zanjado. El técnico ilerdense situó la sala de máquinas del Nàstic en un nuevo contexto tras la reanudación del Lleida-Nàstic. El entrenador grana decidió romper con lo establecido y situó a David Goldar en el puesto de mediocentro defensivo. Fue una modificación radical a nivel de esquema para un equipo que pasó del 3-4-3 al 4-3-3 con el central gallego como principal herramienta de cambio, pasando de defensa central a pivote.

La decisión adoptada convenció, puesto que Goldar repitió como pivote ante el Castellón. Su rendimiento ante el equipo albinegro volvió a ser notable. Siempre se suele arropar en la fiabilidad. Así lo demostró desde la primera vez que se enfundó la zamarra grana. En la medular cortó y distribuyó con criterio, sin demasiadas estridencias, como debe hacer un centrocampista posicional.

Con el bajo rendimiento de Viti y Javi Márquez todavía en plena recuperación, la figura del futbolista de Porta se ha convertido en vital para el centro del campo. Nadie discute que su posición en estos momentos está en la sala de máquinas. Allí ofrece un equilibrio y una disciplina defensiva que el equipo había echado en falta durante toda la temporada. Además, libera a Petcoff, permitiendo al argentino coger el timón y haciéndole sufrir menos en fase defensiva. Los dos conforman en estos momentos un doble pivote en el que el equipo tiene que arroparse para levantar el vuelo.

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