Guillem Jaime debuta en el fútbol profesional

El fútbol no es un cuento de hadas y cuando uno abandona la cantera del FC Barcelona se da de bruces contra la realidad. Guillem Jaime ha vivido el sabor amargo de la espera. Este pasado verano decidió poner punto y final a su carrera en el conjunto azulgrana y aceptar la oferta del Castellón, la entidad que más fuerte apostó por sus servicios.

Fueron muchas las ofertas recibidas de clubes de Segunda y del extranjero, pero Óscar Cano, técnico de los orelluts, fue una pieza capital para conseguir su llegada. El entrenador le convenció para dar el salto al fútbol profesional de su mano. El jugador de Torreforta terminó aceptando el envite y Castalia iba a ser el escenario en su primera parada lejos de La Masía.

No han sido meses fáciles los iniciales porque Guillem Jaime ha descubierto la dureza del fútbol profesional. Allí no vale ni el nombre ni el pasado. Todo se iguala y la competencia es voraz. El canterano azulgrana ha visto como pasaban las semanas y la tentativa no llegaba. Muguruza contaba con la plena confianza de Cano y el de Torreforta veía los partidos desde el escenario más amargo del fútbol para todo jugador, el banquillo.

Sin embargo, Jaime nunca bajó los brazos. Su comportamiento ha sido intachable. Consciente de que su oportunidad iba a terminar llegando ha trabajado en cada entrenamiento con la intención de convencer a su técnico de que merecía una oportunidad.

Finalmente, el debut en el fútbol profesional llegó este pasado fin de semana. Guillem Jaime cumplía el sueño de todo niño de barrio. Torreforta vio sus primeros pasos con un balón y el estadio de Castalia fue testigo del debut como profesional del lateral derecho. Un antes y un después en su prometedora carrera. Un premio a la constancia y al talento. Largas horas en el taxi de Tarragona a Barcelona durante muchos años y siempre superando las cribas de la exigente cantera del Barça donde el talento emerge cada año para intentar vivir del fútbol.

Lamentablemente su debut en partido oficial no llegó con el equipo de su corazón, pero con el Castellón ya puede presumir de haber debutado en Segunda División. No pudo hacerlo con victoria, puesto que el Girona derrotó a los orelluts por un ajustado 0-1 en un encuentro en el que Jaime disputó 75 minutos.

La primera piedra ya está puesta y ahora la intención es la de seguir acumulando minutos y ganarse la confianza absoluta de Óscar Cano. Joseba Muguruza es competencia pura y una oportunidad para curtirse de cara al futuro. El fútbol profesional no es fácil y Guillem Jaime ya lo ha comprobado, pero el esfuerzo siempre acaba dando recompensa.