El Tiempo
Estado Carreteras
Whatsapp
Encuesta
Directorio Empresas
Juegos
Joan Soteras (Sabadell, 1948) acudió este jueves a Tarragona para llevar a cabo una reunión con los clubes de la demarcación para justificar la toma de decisiones federativas en este tiempo de pandemia y dar respuesta a las muchas preguntas que asolan a unos clubes con las arcas temblando tras una temporada y media extraña. Entidades, algunas, que se han unido en asociaciones y plataformas que opositan contra su figura y que tiene al dirigente sabadellense muy enfadado.
¿Por qué estas reuniones itinerarias por todas las delegaciones?
Con la reanudación de las competiciones, tras casi un año parados, entendí que era bueno acudir a las delegaciones para dar la cara personalmente. Hablar con los clubes y presidentes para que me pudieran preguntar cualquier inquietud. Es lo que estoy haciendo. Con la de Tarragona es la undécima. De esta manera tengo contacto con 400 presidentes y es muy bueno que me puedan decir lo que piensan. Acepto las críticas. Lo que no acepto son las mentiras. No las soporto.
¿Ha escuchado muchas mentiras?
De los clubes no. Pero si hay mentiras es porque gente externa les ha contado. Yo intento aclararlas.
Mismas cuestiones preocupaciones.
No has tocado vivir una pandemia inesperada que ha afectado a todos. También a la Federación. He tenido que tomar decisiones, acertadas o no, pero muchas de ellas no he hecho nada más que comunicar lo que me decían quienes mandaban. Como por ejemplo el Procicat. Si se dejó de jugar al fútbol fue porque la Generalitat decidió que se tenía que parar. No podía hacer otra cosa. Igual que la reanudación de las competiciones. Se me achaca a mí, pero no es decisión mía, sino de un plan de competición que se aprueba en Blanes. El Plan de Competición, la ley y el reglamento son soberanos. Si hubiera hecho algo en contra ya hubieran salido la gente que está esperando que me equivoque para ir corriendo a pedir mi inhabilitación.
¿Cómo ha sido la relación con el Procicat/Generalitat durante la pandemia?
La Federació ha sido muy respetuosa con el Procicat y la Generalitat porque su trabajo ha sido mucho más delicado que el nuestro. Nadie nos puede achacar falta de lealtad. Otra cosa es que nosotros pensáramos en algún momento, a lo largo de este año, que se podía jugar a fútbol porque la tasa de contagio era mínima. Según un estudio del CSD era de un 0.27. Intentamos hacérselo ver al Procicat para que permitieran jugar a fútbol pero dijeron que no y nosotros seguimos siendo respetuosos.
Ha habido clubes también que se han quejado.
Y muchos porque han sido manipulados por gente externa que quiere poner a los presidentes en mi contra y en contra de la Federació. Cuando no hay fútbol y solo se habla de cosas extradeportivas, cuesta muy poco engañar a la gente. Y eso es lo que ha hecho cierto sector de gente que no están en el fútbol, que han estado y que quieren volver. Pues no. No se merecen ni mi respeto ni nada. Son una banda de embusteros profesionales que quieren volver a expoliar a la Federació.
¿Se refiere a la Plataforma ‘Per una FCF dels clubs’ y a la Asociación de Clubes de Fútbol Aficionado de Cataluña (ACFAC)?
A la plataforma les tengo el mayor de los respetos. Sus opiniones son respetables. Que hagan su camino. Lo que no permito, insisto, es la mentira y la manipulación. Van en contra del fútbol. Hay una cúpula de personas que quieren volver a tener el pastel. Si puedo, legalmente, no lo tendrán. Han comido de él durante un montón de años y si quieren volver a entrar para llevar a cabo acciones ‘no recomendables’ lo impediré. Soy el presidente que menos ha gastado. No es cierto lo de los sueldos. Se creen que la gente es tonta. Dicen cosas sobre mí y me insultan. No me gustaría entrar en ese terreno porque podemos ir todos.
¿Qué tipo de mentiras?
Por ejemplo que he dejado de lado a los clubes territoriales cuando he sido el único que se ha acordado del fútbol territorial. Nadie nunca había dado un euro al fútbol territorial. Yo he dado 1,4 millones de euros anuales en la campaña destinada al fútbol territorial. Además la campaña de fútbol femenino #Orgullosa la he alargado dos años. Y a los clubes que no cobraban ni de una ni de otra también les he aportado un asignación. Pero no de ahora. Se aprobó en septiembre. Me he acordado de todos y ahora me dicen que he tirado el dinero. Yo soy de los que no tiran nada. Si hubiera hecho como los antiguos que dirigían esta casa, actualmente la FCF no existiría. Tengo mil defectos, pero tengo la virtud de ser un buen gestor.
Hay clubes que han decidido no jugar por la pandemia, ¿se les sancionará?
La normativa es sagrada. Los clubes así lo deben entender. Una cosa son clubes que no se apuntaron y otros que han dejado de jugar. Estos segundos tienen una sanción. No será económica porque la Junta Directiva aprobó anularla. Pero no pueden esquivar la sanción deportiva. Descenderán dos categorías. Lo que sí llevaré a la Asamblea es que de manera excepcional, solo por este año, que se anule la imposibilidad de subir en dos temporadas.
Se ha jugado Primera Catalana, pero no Segunda Catalana. ¿Cómo encajarán los equipos que suben y bajan si hay una categoría que no se ha disputado?
El departamento de competición de la FCF está trabajando en ello para llevar a la Asamblea. Habrá cambios. La competición territorial actual no era la mejor. Nos tenemos que modernizar. Los de Segunda Catalana deben tener algo de beneficio ya que ha sido la más perjudicada porque el plan de competición no les ha dejado jugar. Intentaremos hacer un plan de competición más competitivo y agradable. Además de subir los primeros que se haga un play-off entre segundos, tercero, cuartos y quintos para que haya más emoción. Reducir el número de equipos por grupo a 16 o 18. Que sea más atractivo.
¿Qué propuestas tiene la FCF para seguir impulsando el fútbol femenino?
La campaña #Orgullosa ha tenido un impacto con un incremento del 15% de fichas federativas femeninas. Por eso seguimos con ella. Pero tenemos que tener claro que el fútbol femenino está a años luz del masculino. Tenemos 14.000 licencias femeninas, mientras que masculinas son 165.000. Es un abismo. Lo estamos haciendo bien, somos los que tenemos más licencias y un equipo excepcional como el FC Barcelona, un espejo para las niñas y un orgullo para todos. Tenemos que seguir impulsando el femenino pero el que manda es el fútbol masculino.
Como vice-presidente de la RFEF, ¿qué sabemos de la Primera RFEF?
Soy el presidente de esta categoría. Creo que es un acierto haberla creado porque estará la flor y nata del fútbol español. Hubiera sido mejor 18 equipos por grupo, pero serán 20. Estarán los mejores de Segunda B. Será una categoría que se podrá autofabricar ingresos. Obtendrá una buena cantidad en concepto televisivo. No está cerrado pero será una cifra importante. La RFEF la mimará con unos condicionantes que los clubes deberán cumplir. En el primera año no, pero en la segunda temporada las cosas irán en serio porque será la antesala del fútbol profesional. La Primera RFEF es la joya de lo corona.
