La Generalitat presume de compromiso

El secretari general de l’Esport, Gerard Figueres, explicó ayer la participación de la Generalitat de Catalunya en los XVIII Jocs Mediterranis Tarragona 2018, una “apuesta” que se ha traducido en una importante aportación económica para la construcción del Palau d’Esports Catalunya y la adecuación de otras instalaciones deportivas, así como para diversas actuaciones de soporte a este “proyecto con una ambición territorial y de país” en el ámbito organizativo, comercial, laboral, cultural y de voluntario, entre otros.

“Estamos convencidos de que los Juegos dejaran un legado importante a todas las sedes por lo que hace a la reforma de equipamientos, la creación de ocupación, el fomento de la práctica deportiva y el desarrollo económico”, expresó Gerard Figueras. Además, destacó que estos Juegos pueden ser una oportunidad para el dialogo entre España y Catalunya ya que es una oportunidad única para que reine el espíritu de la “Pax Olímpica”. A lo que añadió que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, estará presente en la inauguración del Palau d’Esports pero todavía no se sabe la fecha y la hora exacta.

Durante la rueda de prensa, celebrada en la Representación Territorial de l’Esport en Tarragona a dos semanas del inicio de la competición, Gerard Figueres hizo hincapié en el “acuerdo político entre instituciones que ha permitido organizar y celebrar unos Juegos “de primer nivel”, así como “un esfuerzo conjunto de las administraciones públicas y de sociedad civil”. Según el secretari general de l’Esport, el compromiso del Govern por el éxito de la competición se ha traducido en una aportación directa e indirecta de 32,2 millones de euros, la mayoría de los cuales se han destinado a la construcción y a la adecuación de instalaciones, con el nuevo Palau d’Esports Catalunya como equipamiento principal.

En lo que se refiere a la construcción de este pabellón moderno, funcional y con capacidad para 5.000 espectadores que acogerá la competición de balonmano de los Juegos, el Govern ha aportado la cuantía de 17,8 millones de euros. “Es un equipamiento emblemático, que quedará para los tarraconenses que será una referencia” para la funcionalidad y el doble uso (preparado para competiciones de alto nivel y para el día a día con tres pistas grandes), para la calidad en la construcción con estándares europeos (está diseñado con simulaciones y tecnología BIM) y para ser enérgicamente de clase A (gasta menos y optimiza la energía). 

En cuanto a otras actuaciones vinculadas a los equipamientos, la Secretaria General de l’Esport (SGE) cedió el derecho de superficie para la construcción del Complejo Deportivo Sant Jordi, ha cedido el Canal Olímpic de Catalunya para disputar las pruebas remo y piragüismo, ha comprado material de gimnasia mediante la Federación Catalana de gimnasia, ha cedido material deportivo de halterofilia y ha financiado la ubicación de un punto de tecnificación provincial de tenis de mesa en el Complex Educatiu de Tarragona.

Además, la SGE, a través del CAR de Sant Cugat, cederá el responsable médico del Equipo de Control Antidopaje, 5 médicos y un fisioterapeuta; destinó, a través del INEF Catalunya, un profesor cualificado para apoyar en tareas de organización, y encargó un estudio de viabilidad sobre el Anillo Mediterráneo.

El secretario general del Deporte estuvo acompañado durante la comparecencia por el comisionado de los Juegos Mediterráneos del Ayuntamiento de Tarragona, Javier Villamayor, que destacó el "esfuerzo inmenso" que ha hecho la Generalitat "no sólo en el Palau d’Esports, que era muy reclamado en Tarragona, sino también en el resto de actuaciones”.