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Los amantes del cicismo de Tarragona tienen hoy una cita ineludible con la Volta a Catalunya. La centenaria ronda catalana iniciará su sexta etapa en la capital tarraconense, delante de la Anella Mediterránea, para finalizar 193 kilómetros después en Mataró.
El trazado tendrá dos puertos de tercera categoría (Port d’Ullastrell y Alt El Collet) y dos metas volantes al sprint (Sant Jaume dels Domenys y el Circuit de Catalunya). En su paso por la demarcación, el trayecto llevará a los ciclistas a Altafulla, La Riera de Gaià, Salomó, Masllorenç, la Bisbal del Penedés, Llorenç del Penedés y Sant Jaume dels Domenys, entre otros municipios.
En la salida el inglés Adam Yates (Ineos) lucirá el maillot de líder que posee desde la tercera etapa. Tras la quinta etapa de ayer, en la que se impuso el alemán Lennard Kämna (BORA-Hansgrohe), Yates aventaja a su compañero de equipo el australiano Richie Porte en 45 segundos. El español Alejandro Valverde (Movistar) es cuarto a 1.03 del líder.
En la etapa de ayer la carrera cambió en Montserrat, puerto de primera categoría. Antes de afrontarlo, parecía que el francés Rémi Cavagna (Deceuninck-Quick Step) contaba con muchos números para llevarse el triunfo de etapa, pero se le fundieron las piernas durante la subida.
El ataque de Cavagna llegó a 54 kilómetros del final, cuando saltó de un pelotón cabecero de 45 corredores que se acababa de agrupar al haberse juntado los tres grupos de escapados que se formaron en el tramo inicial de la etapa, con el Coll de Comiols, un puerto de tercera categoría, como protagonista.
En la fuga también estuvieron el español David de la Cruz (UAE-Team Emirates), el holandés Steven Kruijswijk (Jumbo-Visma) y el colombiano Rigoberto Urán (EF Education-Nippo). Además, el equipo Movistar situó a cuatro corredores: Carlos Verona, Sergio Samitier, el italiano Dario Cataldo y Marc Soler.
Cavagna no paró de incrementar la distancia hasta Monistrol de Montserrat, el pie del puerto de Montserrat, que comenzó a subir con prácticamente dos minutos de ventaja respecto al grupo perseguidor y cuatro y medio respecto al pelotón.
El terreno favorable provocó que se reagruparan 15 corredores a 9 kilómetros para el final en la cabeza de carrera, momento en el que Kämna volvió a cambiar el ritmo para esta vez sí, irse en solitario hasta el triunfo de etapa.
